La respuesta está en el perro

El perro sólo quería ser uno más que sumaba gracia y color a una causa noble que defendía su amiga y las amigas de sus amigas.

Cuesta decir «dueña» en lugar de amiga pues no es ésa la relación entre ellas, por más que haya una cadena por medio, que solo busca que no se pierdan una de la otra, que no quede despistada en medio del barullo de piernas solidarias y atléticas.

El perro siempre quiere estar al lado. Y hacer lo que debe, quiere y sabe hacer. En este caso acompañar. En el caso de Leandro el pastor reunirle las ovejas en círculo en tan solo unos segundos para que no se metan entre los maíces y causen algún daño y algún problema. En el caso de Tasines vigilar desde sus puestos de espera para que el lobo no haga estragos. En el caso de Calcetines tirar por el trineo de Dobra y Vega para que puedan llegar a la escuela cada mañana sin que la nieve sea un obstáculo insalvable. En el caso de Samba permanecer quieta en el regazo de Ausencia sentada en un banco mientras ella ve pasar gente y la acaricia metiendo los dedos entre su pelo ensortijado y blanco. Marley buscaba cuerpos enterrados allí donde nadie podía llegar...

Y, pese a ello, todos quieren simplemente ser uno más.

Por eso, ver en todos los programas petardos a un perro al que han convertido en títere de feria por una ocurrencia... da una cosa más triste.

¿Cómo era aquello? No metáis vuestras sucias mentes...