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La renta fija está de moda

14/03/2023
 Actualizado a 14/03/2023
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En un momento de elevada inflación y con opciones de rentabilidad en torno al 3% a un año, muchos ahorradores están dando el paso a este tipo de inversiones. Más en el contexto de un mercado que apenas ofrece rentabilidad para los ahorradores más conservadores: recordemos que los bancos ya han anunciado que aplicarán la subida de tipos de interés a sus clientes sólo a partir del verano. Por ello, y ante el particular momento que se está viviendo, hablaré de uno de los activos financieros preferidos por los inversores conservadores: la renta fija.

Pero ¿por qué lo prefieren? Principalmente porque ofrecen un riesgo más bajo que casi cualquier otro activo. Eso sí, esta menor exposición al riesgo también se traduce en rentabilidades menores.

¿En qué consiste? Son deudas que ofrecen tanto las empresas privadas como los entes públicos que es comprada por los inversores que obtienen la devolución de su dinero en un plazo junto con una rentabilidad especificada. De ahí que se llame renta fija. Dependiendo de sus características, se habla de renta fija pública: en este caso, bonos y obligaciones emitidos por los diferentes Estados que utilizan esta financiación para complementar los ingresos de los impuestos. O privada: la emiten las empresas privadas cuyo principal objetivo suele ser la realización de proyectos para los que necesitan financiación. A corto plazo: bonos que tienen un vencimiento máximo de 18 meses. Estos títulos poseen una liquidez alta, aunque ofrecen menor rentabilidad frente a otros bonos. O a medio y largo plazo: el plazo de vencimiento de estos bonos y obligaciones debe ser superior a dos años. Esto significa que ofrecen mayor rentabilidad, pero son menos líquidos.

Hoy por hoy, la estrella de la renta fija pública son Las Letras del Tesoro español con una rentabilidad en el mercado secundario del 3.30% a un año.
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