Antes de que llegara el pobre Luis Tudanca ayer a Villamanín (pobre porque el hombre sigue adelante con su agenda manteniendo al personal a distancia porque ha dado positivo en el maldito virus) parte de su equipo se encontraba preparando el equipo para su intervención ante los medios, con micrófono y conexiones varias los compañeros de la radio. Pasaron unas señoras camino de las clases que se dan en los sótanos del Ayuntamiento y, al ver la parafernalia, preguntaron: «¿Qué hay verbena?». La gente está a lo que está, y a lo que está la gente a lo importante.
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