La representante del gobierno central quiso poner de manifiesto el compromiso de «apoyo» a estas iniciativas desde el organismo al que representa, ya que «lo importante es poner en valor la relevancia de la modernización de los regadíos para la sostenibilidad de la agricultura y para un sector importante como es la agroalimentación». Martín explicó que España es uno de los países con mayor superficie de regadío, con 4 millones de hectáreas. Asimismo, de las siete modernizaciones que se están llevando a cabo el 53% están en Castilla y León, y de las cinco nuevas tres serán en León. «Es una apuesta importante por lo que significa el regadío como dinamizador de economía, generador de empleo y corregidor de desigualdades territoriales y sociales». En este punto habló de otro elemento que actualmente azota duramente al medio rural: la despoblación. Para la representante del gobierno, «el gran reto es generar oportunidades y apoyo a estas iniciativas», y más en una zona que produce casi la totalidad del lúpulo del país como es el Órbigo. Porque teniendo en cuenta que, según Martín, «no se cubre la demanda nacional, es importante impulsar estas zonas de regadío, que garantizarán la producción». La delegada no quiso terminar su intervención sin mencionar que este trabajo ha podido salir adelante gracias a la colaboración entre las instituciones competentes.
La directora de Desarrollo Rural de la Junta, por su parte, enfatizó en que la Administración Autonómica ha actuado en más de 2.200 hectáreas en materia de concentración parcelaria, para lo que se ha invertido un total de más de 2,2 millones de euros. Una muestra de «compromiso, pero nuestro trabajo no finaliza ahí. Una vez se lleven a cabo los trámites necesarios por parte de la Confederación Hidrográfica del Duero con respecto a la modernización, se podrá finalizar el proyecto de regadío para más de 900 hectáreas, que supondrá una inversión de unos 10 millones de euros en la zona para la mejora del regadío, con fecha de finalización prevista en 2022. Esta modernización de regadío será un revulsivo para la zona y para el lúpulo en particular, porque se garantizarán estos cultivos», incidió la representante autonómica.
De esta manera, el portavoz de las comunidades de regantes, en referencia a este proyecto de modernización que se llevará a cabo, indicó que «se trata de una infraestructura de futuro que va a representar y modernizar unas 900 hectáreas. No es mucho cuando se habla de otras latitudes donde los territorios son mucho mayores, pero aquí en la Ribera es una extensión considerable. Por ejemplo, supone que podemos tener la capacidad de duplicar la producción de lúpulo a nivel nacional, que está en 550 hectáreas actualmente».
Al encuentro de Llamas de la Ribera también acudieron otros miembros políticos y representantes de diferentes organismos, como el subdelegado del Gobierno en León, Faustino Sánchez, el jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta, Fidentino Reyero, o la presidenta de la CHD, Cristina Danés, que aprovechó su visita para explicar la situación en la que se encuentra actualmente el estudio sobre la regulación lateral del Órbigo.
Presas del Órbigo
La representante de la CHD explicó este miércoles en Llamas de la Ribera la situación en la que se encuentra el proyecto de las presas de La Rial y Los Morales. «El estudio de viabilidad no solo contempla el aspecto ambiental, que ya se hizo y la evaluación salió en positivo. Pero había que estudiar el aspecto social y económico, y se ha encargado a la Universidad de Salamanca. Está muy avanzado, hay una serie de alternativas y espero que en un plazo muy corto podamos dar una visión de los resultados y tomar una decisión», apuntó.Tras las intervenciones de los representantes de los diferentes organismos, los asistentes visitaron una plantación de lúpulo para contemplar de primera mano, después, el proceso de secado... del cultivo.