La mejor opción para iniciarse en la estrategia

Catan y Carcassone, dos juegos ideales para iniciarse en los juegos de mesa y disfrutar horas y horas. ¿Cambias un trigo por dos ovejas?

Jesús Coca
06/07/2022
 Actualizado a 06/07/2022
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Si quieres adentrarte en el mundo de los juegos de mesa o conocer nuevas opciones dentro de ellos, durante todo el verano en La Nueva Crónica te iremos recomendando en un serial semanal nuevas opciones que quizá conozcas, de las que hayas oído hablar o que sea la primera vez que sabes de ellas pero te inciten a probar.

Para empezar vamos con el Catan y el Carcassone, dos de esos ‘clásicos’ que todo aficionado al género conoce y que no sólo son la mejor opción posible para adentrarse en los juegos de estrategia, sino que reúnen todos los condicionantes para reunir en torno a ellos a personas más y menos acostumbrados a ellos, y para disfrutar horas y horas porque cada partida es distinta y ofrece múltiples maneras diferentes de llegar a la victoria.

¿Me cambias un trigo por dos ovejas? ¿Alguien me da piedra? ¿De verdad no va a salir ni un solo siete en toda la partida? Si tienes al lado a alguien jugando al Catan, probablemente en algún momento escuches una de esas frases.Se trata de un juego de gestión de recursos, donde compites contra el resto de jugadores pero a la vez negocias con ellos, siendo el objetivo explorar y colonizar una isla, valiendo puntos lo que vayas construyendo y ganando quien antes alcance un número determinado.Por turnos se van tirando los dados,se cogen las cartas correspondientes a lo que haya salido, vas colocando poblados y ciudades en un tablero que varía en cada partida, intercambias (si llegas a un acuerdo) recursos con tus contrincantes...Eso sí, es para tres o cuatro jugadores, por lo que si lo quieres para jugar en pareja, mejor otra opción, aunque hay una expansión que permite hacerlo nunca funciona al nivel del juego original. ¿Y el Carcassone? Pues por contra va a la perfección con dos jugadores, aunque también con tres, cuatro o cinco (hay expansión para llevarlo hasta ocho). Además su duración es mucho más corta, pudiendo ser cada partida de media hora mientras el Catan se va en torno a los 90 minutos.

Funciona con losetas, cogiendo en cada turno una un jugador una y colocándola sobre un mapa que se va formando con ellas y que es por tanto distinto en cada partida. ¿El objetivo? Ir colocando las figuras (limitadas) de las que dispones y sumar puntos con caminos, iglesias, ciudades, granjeros... los cuales se van sumando durante la partida pero también al final, dejando todo abierto y con posibilidad de vuelco en el resultado una vez que finalice al acabarse las losetas.

Tiene mucha más táctica y estrategia de la que puede parecer por su aparente simpleza y cuenta con numerosas expansiones que añaden nuevas variantes, losetas y objetos con los que puntuar al juego.
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