La lista de los regalos 2018

Voy a lanzar públicamente mi lista de regalos de este año, para ver si Papá Noel me hace caso (a los Reyes Magos ya les llegará otra diferente) y cumple con lo que le pido, aunque sea por una vez. Quizá un clásico en estas listas está el yate, a ser posible nuevo y que consuma poco, pero no me voy a poner tiquismiquis con el tamaño, me vale con poder amarrarlo en cualquier puerto del Mediterráneo o del Caribe. Lo siguiente en la lista sería la paz en el mundo y dinero para todos, pero como no quiero parecer Miss Universo o uno de MHYV, me conformo con algunas cosillas que bien le vendrían a León. Recuerdo cuando se pedían grandes infraestructuras sanitarias, como un centro de salud en El Ejido o la reforma de Pinilla. Qué tiempos... Ahora hay que conformarse con que haya un pediatra y un médico de familia ahí donde se necesite, pero ya sabemos que la culpa es del Gobierno y de las facultades, no de los sonrojantes contratos que se ofrecen desde la Junta, aunque de esto saben también mucho los maestros... Una de las reivindicaciones históricas para León era que llegara el AVE y una buena línea de Feve, así como la autovía a Valladolid, pero hemos bajado tanto el nivel de las peticiones (o subido el del desprecio político desde Madrid) que lo más urgente es arreglar las carreteras varias a Benavente, la doble vía de la supuesta Alta Velocidad y que haya trenes hasta la estación de Matallana. Todo lujos.

No es de extrañar, no sabemos cuándo pasó, pero hay detalles que hablan de que todo empeora. Sin metáforas. Si antes pedíamos igualdad entre hombres y mujeres, volvemos atrás para reclamar que ellas puedan salir sin miedo a la calle. Si la libertad de expresión fue un logro en el 78, ahora la delgada línea de la ofensa te recuerda que la inquisición no está muerta. Y si antes el Periodismo servía para denunciar la corrupción que asola el país, ahora un juez te puede requisar hasta la grabadora y el móvil, que estos días se empieza a llenar de mensajes muy originales sobre la Navidad. Al menos, señor de rojo, podría hacer que tocara la Lotería en León, y a ser posible la de este periódico, que ha regalado a sus lectores 30 décimos y así sería un premio más repartido aún. Pero no olvide el yate, por favor.