La Junta "no tiene mucho que decir" sobre ‘Muerte en León’

La portavoz apunta que el asesinato de Carrasco es un caso cerrado y elude opinar sobre las alusiones a un asesor de Herrera en el documental de Webster

S. Jorge
22/08/2017
 Actualizado a 14/09/2019
La portavoz de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos. | ICAL
La portavoz de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos. | ICAL
La portavoz de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos, rechazó este lunes tras el consejo de gobierno hacer una valoración sobre la investigación realizada por el periodista Justin Webster en el último capítulo del documental ‘Muerte en León’, que ha vuelto a la actualidad recientemente, y en la que se aludía a las continuas llamadas que supuestamente había recibido un asesor de Juan Vicente Herrera por parte de la hija confesa de la asesina de Isabel Carrasco, Triana Martínez.

Marcos expuso ayer que «la Junta no tiene mucho que decir» sobre este asunto que, según recordó, está "cerrado" con una sentencia firme. "Yo respeto la decisión de la televisión privada que emitió esta serie", especificó Marcos, que subrayó "las diferentes sentencias judiciales y los diferentes organismos y órganos oficiales que han hecho el análisis y que han determinado sentencias". "Estamos hablando de la Fiscalía, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, de la Audiencia Provincial de León, del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional", agregó la portavoz del Ejecutivo, que señaló que «los tres primeros emitieron sentencia y conocieron toda la información que han precisado y que han demandado", de ahí que insistiera en que "la Junta no va a hacer ningún tipo de valoración", puesto que el Gobierno presidido Herrera considera que "el tema está cerrado por quienes realemente son los que hacen las valoraciones judiciales, que son los órganos judiciales».

Margos respondió así a las alusiones que se hacen en la serie a las continuas conversaciones telefónicas que mantuvieron Triana y el que entonces era asesor del presidente Herrera, Luis Estébanez, antes del asesinato de Carrasco, incluso horas antes del crimen, y que no fueron investigadas por la Policía.
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