La Junta destina 3,8 millones para el acelerador donado por Amancio Ortega

Sanidad estudia si se puede mantener el tercer equipo de radioterapia de León mientras se instala el del Bierzo, para el que aún no hay plazos

Sergio Jorge
21/02/2020
 Actualizado a 21/02/2020
El último acelerador lineal instalado en el Complejo Asistencial Universitario de León. | L.N.C.
El último acelerador lineal instalado en el Complejo Asistencial Universitario de León. | L.N.C.
La Junta de Castilla y León aprobó este jueves en junta de gobierno destinar 3.808.296 euros para la adquisición e instalación de un nuevo acelerador lineal en el Complejo Asistencial Universitario de León. Se trata de un equipo de última tecnología que forma parte del paquete de donaciones de la Fundación Amancio Ortega y que de esta forma podrá entrar en funcionamiento en la capital leonesa antes de que finalice el mandato, ya que la idea de Sacyl es que este año se saque a licitación y a adjudicación la obra y comiencen los trabajos, para que así pueda entrar en funcionamiento como muy tarde en 2022.

Según detalló este jueves la Junta, este equipo de radioterapia servirá para sustituir a uno de los dos que prestan servicio actualmente en el Complejo Asistencial, concretamente el más antiguo, que fue instalado en 2008. Pero la idea de Sacyl, según explica a este periódico su gerente regional, Manuel Mitadiel, es que si se permite por contrato, puedan estar en funcionamiento los tres de la capital leonesa hasta que se instale el previsto para el Hospital del Bierzo.

Son varios los condicionantes para que se dé esta premisa. En primer lugar, hay que tener en cuenta que el contrato que se firme para la adquisición del nuevo acelerador lineal no solo incluye la compra del equipo y la construcción del búnker necesario para su instalación, sino que además obliga a la compañía el desmontaje y retirada del más antiguo del Complejo.

A la vez, la Consejería de Sanidad va a estudiar si el contrato de ese equipo de más edad útil permite que pueda seguir en funcionamiento hasta que el acelerador lineal previsto para el Hospital de Ponferrada esté operativo tras las pruebas iniciales que se necesitan para su puesta en marcha, garantizando así el servicio para todos los pacientes de las dos áreas de salud y solventando el incremento de demanda y las necesidades temporales, como en verano, cuando en ocasiones son «insuficientes» los dos actuales, según reconoce Manuel Mitadiel.

Otro aspecto a tener en cuenta es que el acelerador lineal donado por Amancio Ortega no depende del presupuesto de la Junta de Castilla y León, por lo que su obra es independiente de si hay cuentas o no aprobadas. No sucede igual con el equipo de radioterapia comprometido para el Hospital del Bierzo, ya que sí tiene que estar incluido en este ejercicio, de ahí que hasta que no se apruebe, no puede ni siquiera licitarse su proyecto. Por el momento, la Consejería de Sanidad está elaborando el plan funcional para este servicio en Ponferrada, y después tendrá que licitarse la redacción del proyecto.

Hay que tener en cuenta además que las obras son diferentes, aunque las dos necesiten un búnker, ya que en el caso del Hospital del Bierzo hay que adaptar también las consultas necesarias para prestar este servicio, por lo que el proyecto podría demorarse más, puesto que no está claro si la Junta de Castilla y León podrá licitar el contrato para todas las actuaciones.

De hecho, en Ávila no se ha podido, por lo que en el centro sanitario abulense se contratará por un lado las obras (que incluyen el búnker y las consultas para todo el personal sanitario necesario)y por otro la adquisición de este aparato de última tecnología.

La intención de la Junta además es crear dos equipos gemelos en León y el Bierzo, para que así se replique todo lo que se hace en cada uno de ellos.
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