La inversión total será de 24 millones de euros y actualmente se está finalizando la pavimentación de la traza y las conexiones con las calles adyacentes a la misma. En este sentido, cabe destacar que los adoquines que integran la nueva plataforma tranviaria tienen tonos grises y rojos con el objetivo fundamental de diferenciar la zona de paseo para los peatones y la de circulación de los trenes-tranvía.
Además, se trabaja ya desde hace unos días en las instalaciones de seguridad y en los elementos de regulación semafórica. Asimismo, están en ejecución el equipamiento de los apeaderos y el puesto de control de tráfico, que estará ubicado justo al lado del apeadero del barrio de la Asunción. Es precisamente en este punto donde han tenido su parada final los trenes de Feve desde que comenzaron las obras de integración de la línea hace ya algo más de seis años.
Es preciso destacar además que la integración de Feve en León tiene por objeto la transformación de la línea de ancho métrico de Adif que discurría por la capital en una red tranviaria integrada en el entramado urbanístico y con cinco paradas a lo largo de su trazado.
En el proyecto en ejecución se contemplan las obras correspondientes a la superestructura de vía, instalaciones y acabados. Las obras se desarrollan en una longitud de 2.367,1 metros entre la estación de Matallana, en el centro de León, y la estación de La Asunción-Universidad, situada en el límite del término municipal y donde da comienzo la línea de ferrocarril de ancho métrico León-Bilbao.
El objetivo final es garantizar el buen funcionamiento de los trenes-tranvía una vez que se abra la nueva plataforma entre el apeadero de la Asunción y la estación de Padre Isla. Los convoyes, ya fabricados y custodiados en Valencia, funcionarán como tren en el resto de la línea hasta Cistierna y Guardo como tranvía en el acceso que se está construyendo en el acceso a la capital. En este tramo circularán entre 25 y 30 kilómetros por hora y contarán además con un sistema de frenado rápido y con faldones laterales que impiden que los peatones puedan acabar debajo del vehículo en caso de que se produzca un atropello. A ello se une además la reciente colocación de semáforos en las intersecciones de la vía con las calles en las que los vehículos podrán pasar de un lado a otro de la misma.
El final de las obras de Feve llega después de muchos vaivenes tanto en el diseño del proyecto (se suprimió el ramal hasta el Hospital) como en el desarrollo de las mismas. En este sentido, las obras estuvieron paralizadas durante un año y medio por problemas administrativos y de seguridad. Fue el 9 de junio de 2016 cuando se reiniciaron y se dio entonces un plazo de diez meses para la llegada de los trenes-tranvía hasta el centro de la ciudad. Posteriormente se solicitó una prórroga de seis meses y en junio el ministro de Fomento fijó la fecha que parece definitiva viendo el notable avance de la obra.
Ciudadanos pide más seguridad
Por su parte, el Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de León ha pedido al equipo de gobierno las adecuadas medidas de seguridad para las obras de integración de la línea Feve en la capital, que incluyen los trenes de prueba que comenzarán a circular en los próximos meses. "Queremos pedir al equipo de gobierno que se asegure que se cumplen las medidas de seguridad en la implantación y puesta en marcha de las pruebas que se van a realizar para la integración de Feve con el tren-tranvía", ha manifestado la portavoz de la formación naranja, Gemma Villarroel. "Los trenes deben llegar a la estación de Matallana, pero no podemos correr ningún riesgo y no podemos lamentarnos a posteriori si se produce algún problema", ha declarado la edil de Ciudadanos a través de un comunicado en el que muestra su sorpresa por las recientes noticias que minimizan la seguridad en estas pruebas.