La huerta no es el Serengueti

Casi se podría decir que ningún tópico es verdad, lo que es evidente es que la gran mayoría de los tópicos son falsos, sobre todo los referentes a animales, por más que vengan avalados por algún refrán y nos resulten propicios para argumentar una cosa y la contraria. Ocurre siempre cuando te apoyas en refranes porque no en vano de la misma boca puede salir que «no por mucho madrugar amanece más temprano» y también que «a quien madruga Dios le ayuda».

El refrán madre es «como el perro y el gato», al que nos aferramos para hacer creer que no hay paz en la granja, que un trozo de pan o de terreno desencadena todas las guerras posibles. ¡Cuánto daño hacen los documentales de los tigres del Serengueti!; que va a resultar que es cierto que ve mucha más gente de la que creemos los documentales de La 2.

Pero lo cierto es que resulta más fácil encontrar a una perra que amamanta una camada de gatos huérfanos que a un perro que hace una carnicería. Y las ovejas ni se inmutan porque las gallinas les disputen la parcela de hierba verde y fresca. Y los osos andan por sus escondites...

Tal vez sea que somos los humanos los que tenemos genética de pelea y lo argumentamos con que es lo habitual «entre mamíferos».