La fórmula funciona

Al cierre del pasado año el Parque Tecnológico de León sumaba casi 1.500 empleos en sectores como las TIC o la biotecnología, que son claves la economía globalizada actual en la que provincias como León, con escasa industria y la actividades extractivas desmanteladas, ha perdido muchas oportunidades. Competir en negocios relacionados con las manufacturas o, en general, de productos de escaso valor añadido no es ya una opción para economías como la leonesa, inmersa de lleno en los servicios. Incluso el estratégico sector primario, hace décadas yacimiento de empleo de escasa especialización, se encuentra actualmente altamente cualificado, mecanizado, digitalizado en muchos casos, y con productividad récord. En este contexto, es imprescindible aprovechar al máximo los polos como el de las TIC o el biotecnológico, que según prueba el balance de 2019 del Parque Tecnológico son auténticos salvavidas de una economía que busca la reconstrucción. En la misma línea, como han apuntado recientemente desde la Universidad de León, se puede mencionar el necesario impulso a las energías renovables, un campo en el que la innovación también puede dejar importantes réditos tanto económicos como sociales. Las cifras muestran que el camino puede ser el correcto y que para seguir adelante, además de conceder las máximas facilidades posibles, la Administración Pública también debe hacer atractiva la ubicación para las empresas y ayudar a estas que su oferta laboral sea atractiva por los trabajadores cualificados, que sientan que pueden emprender un proyecto vital en León con las máximas garantías. La pandemia es un nuevo factor en el ecuación, pero hasta la fecha la fórmula ha funcionado. Ahora se trata de recalcular y, a buen seguro, en el Parque Tecnológico de León se hallarán soluciones.