Pero es sólo un primer paso, porque el objetivo es completar la restauración de todo este tramo de la muralla y abrir la Era del Moro para generar una zona verde y un paseo peatonal que sirva para enlazar la plaza del Espolón con la calle Ramón y Cajal en las inmediaciones del molino Sidrón. Se trata de un proyecto que prevé 2,5 millones de inversión con el objetivo de estar ejecutado a finales del próximo año.
La mitad de la inversión se ejecutará este año. Concretamente, el 1,5% cultural del Ministerio de Fomento aportará 625.000 euros, mientras que otros 500.000 corresponderán a fondos europeos y los 125.000 restantes a las arcas del Ayuntamiento de León. Cantidades similares se invertirán en el año 2019, según explicó Franco.
Lo que no será paseable, al menos de momento, es el adarve de la muralla, al contrario de lo que ocurre con otros tramos como los del jardín del Cid o la Casona de Puerta Castillo. La concejala de Urbanismo explicó que Patrimonio no lo ha autorizado, aunque confió en que la restauración completa del tramo sirva para que esta decisión pueda ser modificada y se permita la instalación de una escalera para que los visitantes accedan a la parte alta de la muralla.
En cualquier caso, es preciso destacar que el objetivo pasa por poder abrir a la ciudadanía un solar de titularidad municipal que ahora mismo está cerrado tanto por la zona de la plaza del Espolón como de Ramón y Cajal.