La Diócesis de León también se prepara para la desescalada

Las primeras comuniones y confirmaciones se suspenden y planean celebrarse entre septiembre y noviembre

Ical
05/05/2020
 Actualizado a 05/05/2020
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La Diócesis de León iniciará a partir del próximo lunes, 11 de mayo, la salida del confinamiento y la desescalada de las medidas restrictivas por causa de al pandemia del Covid-19 que han estado vigentes desde el pasado día 14 de marzo, por lo que todas las parroquias ofrecerán ese mismo día una misa por los difuntos por la pandemia.

Para ello, el obispo de León, el obispo Julián López aprobó un decreto por el que la Diócesis de León se adhiere a las reflexiones ante el inicio de la salida del confinamiento expuestas por la Conferencia Episcopal Española.

En el decreto, la Iglesia de León manifiesta su voluntad de “seguir impulsando el trabajo de Cáritas y de otras instituciones eclesiales con las personas que se ven afectadas por la crisis económica y social que ha generado los efectos de la pandemia y el confinamiento”, al tiempo que, “dada la importancia de mostrar especiales signos de acompañamiento a las familias en su duelo”, se establece que “el día 11 de mayo, como expresión de comunión fraterna con los que más han sufrido esta pandemia, todas las parroquias podemos ofrecer la celebración de la eucaristía por todos los difuntos de la pandemia”.

Además, ese gesto eclesial se extenderá a todo el ámbito diocesano, ya que el decreto episcopal establece que “se celebrará en la Catedral un funeral conjunto a nivel diocesano por todas la personas fallecidas en la Diócesis”, cuya fecha “se anunciará en el momento oportuno”, de igual forma que las familias podrán celebrar un funeral individual por cada uno de los difuntos de la comunidad parroquial fallecidos durante los días del confinamiento, así como la celebración de aniversarios”.

El decreto aprobado por el obispo Julián López establece una indicaciones generales de desescalada, que mantienen vigente “la dispensa del precepto de participar en la Misa dominical”, ya decretada desde el pasado día 14 de marzo, así como el “ruego encarecido a los sacerdotes y colaboradores parroquiales que cuiden las medidas organizativas e higiénicas, y a los fieles que observen el cumplimiento de las mismas, a fin de realizar las actividades con seguridad y confianza en nuestras parroquias”.

La transición hacia la completa normalidad se establece en cuatro fases, desde la Fase 0, situación actual con culto sin pueblo tal y como se ha venido desarrollando todo el periodo de confinamiento en la Diócesis de León, para pasar a la Fase 1 a partir del próximo día 11 de mayo y avanzar así hasta la Fase 3, con la recuperación de la “normalidad de la vida pastoral ordinaria, siempre teniendo en cuenta las medidas necesarias hasta que haya una solución médica a la enfermedad”.

Junto con esta temporalización para avanzar en el proceso de desescalada, el Decreto que rubrica el obispo Julián López detalla la “organización de los templos y las celebraciones” y fija criterios para administrar sacramentos como la Reconciliación, el Bautismo, el Matrimonio, la Unción de Enfermos, la Comunión a los enfermos y las Exequias de difuntos, además de prohibir las visitas turísticas a los templos en las fases 1 y 2.

Por último, este Decreto que orienta el proceso de salida del confinamiento en la Iglesia de León establece la suspensión de las Primeras comuniones y las Confirmaciones hasta el primer trimestre del próximo curso pastoral 2020-2021, es decir, de septiembre a noviembre.
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