La diferencia entre muertos y nacidos en la provincia: de la brecha al abismo

Malos augurios demográficos para el territorio leonés, en 2032 el número de defunciones triplicará al de alumbramientos

I. Herrera
29/10/2018
 Actualizado a 19/09/2019
El número de nacidos en la provincia presenta una preocupante tendencia a la baja. En la imagen, el primer niño nacido este año en León. | MAURICIO PEÑA
El número de nacidos en la provincia presenta una preocupante tendencia a la baja. En la imagen, el primer niño nacido este año en León. | MAURICIO PEÑA
No son pronósticos hechos al azar, sino que atienden a la tendencia que recogen las estadísticas y, en base a ellas, se perfila el panorama futuro de los territorios. El informe de Proyección de Población del Instituto Nacional de Estadística (INE) pinta feo para esta provincia. En realidad lo que dibuja es una prolongación de lo que viene sucediendo, pero peor si cabe, pues este mismo estudio auguraba hace dos años que la población a 1 de enero de este año sería más baja que la de entonces, pero no tanto como lo ha sido.

El análisis se hace a 15 años vista; trata de esbozar cómo empezará la provincia el año 2033, y no deja muchas ganas de comer las uvas. De no romperse radicalmente la tendencia, para entonces nacerán 651 leoneses menos. Las muertes bajan, pero no en la misma medida, sino la mitad que los nacimientos, lo que deriva en que si ya a día de hoy la diferencia entre leoneses que llegan a este mundo y los que se van presenta una gran brecha (de algo más del doble de muertes que de nacimientos), en 2032 la brecha ya será abismo y las defunciones prácticamente triplicarán a los alumbramientos.

El número de habitantes del territorio leonés seguirá cuesta abajo, y se esperan para entonces 51.890 habitantes menos de los actuales, tantos como para sustituir a todos los pobladores que tiene actualmente Segovia. Está claro, al ritmo de tres fallecidos por cada nacido los números caen, y eso que León, siempre según estos pronósticos, daría cobijo a más vecinos de otras provincias del país que ahora, aunque de nuevo un ‘pero’, seguirán siendo más los hijos de esta tierra los que se marchen a otros puntos de España.

Inmigraciones a la baja


Señala el informe que este año acabará con unos 1.417 leoneses que se habrán ido al extranjero, esto supone que casi cuatro cada día dicen adiós a su tierra. En 2032 no parecbe que la provincia vaya a estar para echar las campanas al vuelo, pero alguno menos hará las maletas (1.120, calculan), tres cada día.

Esos son los que se van de León al extranjero (que hay que verlo también desde la perspectiva de lo antes citado, que la provincia tendrá más de 50.000 habitantes menos), pero es que también caen los que llegan de extranjero a León, que pasarán, previsiblemente, de 2.423 a 1.971 en estos 15 años. Se habla mucho en estos tiempos de la importancia de la inmigración para el futuro de España por su impacto en el mercado laboral –son sobre todo personas en edad de trabajar que contribuyen al incremento de la producción del país y, en consecuencia, al sostenimiento de las pensiones–. Y parece algo a tener en cuenta, pues si la tendencia estadística se cumple, para el año 2033 un tercio de la población leonesa tendrá más de 65 años.
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