La Cultural encuentra en Jaime Sierra el motor de su medular

El centro del campo estaba siendo un problema para la Cultural durante toda la primera vuelta, pero en una semana ha encontrado dos parches con los que tapar la fuga existente hasta el mes de junio.

Por seis meses llegó cedido por el Elche Jony Álamo y esa es también la duración de contrato con la que aterriza el cuarto refuerzo del mercado invernal, el mediocentro creativo Jaime Sierra, que procede de una UD Logroñés con la que había tenido un papel muy importante el año pasado en Segunda pero se había visto relegado en la actual campaña a uno secundario.

Tiene 23 años, si bien no es sub’23 y ocupará una ficha sénior de la que la Cultural ha pasado a disponer por la extraña normativa tras fichar un tercer portero, mide 1’75 metros y destaca por su perfil creativo, una faceta de la que han adolecido los leoneses hasta ahora.

Pasó por las canteras del Real Madrid y el Valencia pero con quien debutó como profesional fue con el Leganés, en cuyo filial jugó dos años en Tercera, llegando a debutar con el primer equipo en Primera al disputar 28 minutos en dos encuentros durante la campaña 2017-18.

Pasó por las canteras del Valencia y elMadrid, debutó en Primera con el Leganés y ascendió con el Logroñés En el verano de 2019 salió del conjunto pepinero rumbo a la UD Logroñés y ahí ha estado durante las dos últimas temporadas y media. En la primera, la de subir a la categoría de Plata compartiendo Grupo con la Cultural, disputó 13 encuentros, ocho de ellos de titular, pero yendo a más pues se había ganado el puesto cuando la pandemia mundial paró la competición y fue de hecho titular en el partido del ascenso.

Eso hizo que en Segunda pese a las numerosas incorporaciones contara con un rol importante, con 29 encuentros y 13 de ellos saliendo de inicio, con el único gol que ha metido en el equipo riojano en lo que evidencia que no es la llegada su punto fuerte.

En los cuatro últimos meses sólo salió dos veces de inicio y desde el banquillo no jugó más de 25 minutos Sin embargo, este año las cosas cambiaron, siendo significativa sobre la relación con su entrenador que en su carta de despedida del Logroñés especifica que quiere «acordarme del cuerpo técnico de mis dos primeras temporadas». De hecho, tras empezar la liga siendo indiscutible, en los cuatro últimos meses, desde octubre, sólo ha salido de inicio en dos encuentros, no jugando desde el banquillo más de 25 minutos en ninguno del resto, para un total de 620 divididos en 16 participaciones.

En León todo apunta a que su rol volverá a ser protagonista, confiando la Cultural en disfrutar de su progresión y del hambre que se espera traiga para dar un salto hacia adelante en su carrera.

De momento este viernes está previsto que se incorpore ya a los entrenamientos, si bien su debut deberá esperar a que se decida quién sale por él.