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La calor de ‘la coñá’

10/09/2017
 Actualizado a 12/09/2019
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Ya pasó esa canícula tan entrañable en los que entrabas al bar y te besaba un asturiano sin mayor motivo y sin saber siquiera si le habían cedido las fiebres al gocho, para tener algo que celebrar. Y no puedes pedir explicaciones porque te dicen aquello de «qué bonito ye el quererse» o porque no sabemos si el besante tal vez sea uno de la larga familia de los Rocasolano del mismísimo Oviedo y lo prudente es devolverle el beso y si al gocho le sube la fiebre, que sude. Que ya lo decía Don Cenutrio aquel año que le invitaron a cenar por las patronales y la niña avisaba ante ‘la calor de la coñá’: «Padre, que abuela suda».

- Si suda, que sude, tu echa vino.

Ya pasó el trance. Ya nos quedamos solos y como tocaba reunión del Grupo de Filósofos de lo Rural sin Obra Publicada pues emitimos un informe: «Con los que estamos muy contentos es con los de la Comisión para la Despoblación de la Junta, van por muy buen camino. Ya quedamos cuatro y en dos días nos tirarán desde los helicópteros unos topos que transmiten la variante humana del carbunco y no quedan más que los de la Comisión, que como cobran no se mueren ni aunque desayunen sarna».

Y así, en esta soledad de los días posteriores a cuando te besan los asturianos, tenemos la impresión de que unos enlobecemos y los otros enloquecemos. Más de lo segundo, pienso de que, porque hacemos cosas ante las que los sicólogos darían en tirarse al mar sin flotador. Mira el caso de Cardín (diminutivo de Ricardo), que se hizo una casa con las paredes torcidas para joder a las empresas que te hacen los muebles a la medida. Quedó tan de diseño que Vítor el de Canseco, que está estudiando para gitano, le llama Ri Cardín el hermano de Pierre Cardín.

La verdad es que cuando enlobeces por la soledadte vuelves muy de tocar los güevos sin ton ni son. Sin ir más lejos,Sidoro le daba macarrones al gato y todos le insistían: «Que los gatos no comen macarrones».

- Que se acostumbren, que tampoco los comía yo y me tuve que acostumbrar.
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