La bomba espera al último día: Aarón deja la Cultural

No parecía que la última jornada de mercado fuera a ser ni mucho menos intensa en las oficinas del Reino de León. Nada más lejos de la realidad, al menos de puerta para afuera, porque a primera hora de la tarde el club convocaba una sospechosa rueda de prensa de emergencia. El motivo se sabía minutos después que era nada menos que la marcha de uno de sus capitanes, un jugador de la tierra y llamado a ser parte importante del proyecto del centenario del club, Aarón Piñán.

A nadie se le escapaba que la situación del extremo no era la mejor dentro del club, sin embargo, el paso de los días y su buena actuación en el debut liguero parecían haber calmado las aguas dejando claro que el leonés seguiría al menos hasta final de temporada, cuando finalizaba un contrato que, por otra parte, había evitado renovar.

Aarón: "Necesito cambiar de aires mentalmente y a nivel personal, al final de liga ya lo tenía decidido"Una situación que dejaba clara que las relaciones entre el club y el jugador no eran las mejores, reconociendo él mismo en esa comparecencia de despedida el «haber decidido ya al final de pasada liga que quería cambiar de aires». Su papel durante la pretemporada escamó aún más unas heridas que no solo no se curaron, sino que se abrieron, encontrando en el dinero del Intercity, que habría pagado de cualquier forma una cantidad muy alejada de su cláusula de rescisión, la vía para desatascar una situación que deja a Aarón tomando una decisión incomprensible para buena parte de una afición en la que ha pasado de ídolo a villano en unos minutos.

El director general del club, Felipe Llamazares, compareció junto al jugador para explicar su marcha, asegurando haber hecho «todo lo que hemos podido dentro de nuestras posibilidades para que se quedara, pero con ese mismo interés y fuerza nos hemos puesto en su lugar y si él considera que tiene que estar en otro club hemos llegado a un acuerdo satisfactorio para todas las partes». Así, explicó que «es un jugador de la casa y tenía claro que su ilusión era salir, estamos satisfechos por la operación y hemos querido ser sensibles sabiendo que esto es una empresa y hay que tener también frialdad para que seequilibre todo».

Llamazares: Hemos hecho todo lo posible para que se quedase, pero su ilusión era irse y lo respetamosAarón, que agradeció a Llamazares «el haberme tratado como persona por delante de ser un futbolista» y marchándose, entre lágrimas «agradecido a todo la gente de un club al que vine siendo nadie y del que me voy siendo mejor en todos los aspectos», reconociendo también que «han entendido la situación y me han facilitado las cosas». Explicó su marcha el leonés aludiendo la necesidad «de cambiar de aires, es un tema mental y personal, tengo 25 años y he estado siempre en León, juego a esto por diversión y que quizás no haya alguien siempre para decirme los errores que cometo».

El extremo aseguró que «antes del último partido de liga ya sentía esa necesidad de cambiar de aires, a nadie le duele más que a mí irme de aquí y eso lo sabe la gente cercana a mí, no puedo vivir de lo que la gente piense aunque entiendo que estas palabras las valorarán algunos y otros estarán enfadados conmigo». En ese sentido aseguró «ser de la Cultural vaya donde vaya, lo que me ha dado la afición no me lo quita nadie, la ovación del último partido, el estar con los niños... es duro a nivel personal».

Del mismo modo, afirmó «no haber dicho nunca que me quisiera ir, no me levanto un día y ya no quiero seguir, es un cúmulo de cosas que ni siquiera tienen que ver con el fútbol solo, sino también con la vida», pidiendo incluso a la prensa «tener más tacto si pasa algo parecido con la gente de la casa, porque los perjudicados somos nosotros».