La Biblioteca de Compostilla pasa a Escuela de Cerámica tras la cesión de Endesa

La eléctrica ha decidido permitir el uso de esas instalaciones al Ayuntamiento de Ponferrada

M.I.
24/03/2023
 Actualizado a 24/03/2023
Firma de la cesión por parte de Endesa al Ayuntamiento.
Firma de la cesión por parte de Endesa al Ayuntamiento.
El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón y representantes de Endesa firmaron la escritura de donación por la que esta compañía eléctrica cede de forma irrevocable al Ayuntamiento de Ponferrada el local de unos 450 metros cuadrados donde se ubicaba la antigua Biblioteca del Poblado de Compostilla, así como una parcela de unos 7.000 metros cuadrados contigua al edificio de Compostilla I (Térmica Cultural) y a la carretera del Pantano.

Además, la donación también incluye una antigua turbina de la vieja central de Compostilla I, una importante pieza de arqueología industrial que pasa a engrosar los fondos municipales.

Por parte de Endesa firmaron la escritura de donación el director de Patrimonio, Julio Panea; y el responsable Territorial de Patrimonio, Antonio Colchero.

La firma de la escritura habilita al Ayuntamiento para la toma de posesión inmediata de los bienes cedidos.

Las viejas dependencias de la Biblioteca albergarán en un futuro el centro de creación y Escuela de Cerámica.

Endesa cede tres rotores al Museo de la Energía


Endesa además, ha donado tres grandes rotores de la central de Compostilla al Museo Nacional de la Energía, donde quedarán expuestos próximamente después de que hoy hayan sido trasladados desde la térmica a la sede ponferradina de la citada institución. La maniobra ha sido compleja, por el tamaño de las piezas y por su peso, cuya suma supera las 120 toneladas, de ahí que haya intervenido un equipo de expertos utilizando maquinaria especial para estas maniobras.

Endesa está desmantelando sus instalaciones de Cubillos del Sil, fuera de servicio desde junio de 2020. La demolición generará más de 266.000 toneladas de residuos, el 90 % de los cuales serán recuperados en aplicación de criterios de economía circular.

Antes del desmantelamiento, la compañía realizó un estudio para determinar qué equipos de la central podrían tener una nueva vida en procesos de producción, o cuáles podrían ser donados a entidades públicas diversas que los usen o los incorporen a colecciones museísticas. Se inventariaron 74 elementos que han sido donados a entidades sin ánimo de lucro, medida que forma parte de los planes de responsabilidad social de la compañía.

Los equipos que hoy han sido retirados son dos rotores de turbina de baja presión, y otro de alta presión, que pesan 59 y 34 toneladas, y otro de alta presión, de 29 toneladas. Para retirarlos de su emplazamiento incluso ha sido necesario derribar una pared. Utilizando grúas de alta capacidad, los rotores han sido montados sobre caballetes para facilitar su embarque en grandes góndolas y su traslado al Museo de la Energía.
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