¿Cuál es la historia de las semillas feminizadas?
La fama de estas semillas procede de la necesidad de los cultivadores por dar solución a un problema que se venía agudizando y para lo cual parecía no haber solución inmediata. Es preciso señalar que antes de las semillas feminizadas, los cultivos estaban en manos de las semillas regulares, esas que derivan 100% de la naturaleza y que dan lugar a plantas macho y hembras. Lo cierto del caso es que la mayoría de los cultivadores no veían con buenos ojos a las plantas macho, pues estas plantas tienen bajo contenido de THC y además son las responsables de las polinizaciones por lo que es difícil controlar que se sigan procreando plantas macho.
Dada la situación, y gracias a los avances de la ciencia y la tecnología, se hizo posible un nuevo avance en genética del cannabis, de esta manera en la década de los 90 y principios del año 2.000, se hizo posible el deseo de los cultivadores forzando una planta hembra a producir su propio polen y polinizar otras plantas hembra creándose un nuevo híbrido capaz de generar solo plantas de este sexo. En síntesis, la semilla feminizada ha sido manipulada genéticamente con la intención de que pueda convertirse en una planta femenina, esto sin duda representa un gran avance para los cultivos de cannabis, pues se tiene más control además de la seguridad de que no existe riesgo de polinización por parte de plantas macho.
Puntos a favor de cultivar semillas feminizadas
Levantar un cultivo a partir de semillas feminizadas es uno de los más grandes avances en el terreno del cannabis, y es que estas semillas suelen ser las más utilizadas por los veteranos del cultivo y coleccionistas asiduos dado sus maravillosos atributos. En primer lugar, el uso de semillas feminizadas permite ahorrar tiempo, inversión y espacio, pues anteriormente, los cultivadores debían esperar el ciclo evolutivo para cortar y deshacerse de las plantas macho y así disminuir el descontrol de la polinización, por tanto, el espacio que se usó para cultivar estas plantas era desaprovechado.
La seguridad es otra de las cualidades más aplaudidas y que da tranquilidad a los cultivadores, pues estas semillas han sido modificadas para que sólo den lugar a plantas con carga cromosómica (XX). Por lo tanto, se tiene la plena fiabilidad de que los próximos cultivos serán de plantas femeninas; otra de las ventajas de este tipo de semillas es que las plantas que se obtienen no producen semillas debido a que no sufren el proceso de polinización.
Métodos más usados para obtener semillas feminizadas
La intención de esta técnica es lograr revertir el sexo de la planta hembra y para ello se implementan algunas técnicas a base de productos químicos cuyo uso ya ha sido verificado en diversas oportunidades a lo largo de estos años, sin embargo, se hace hincapié en que, las plantas que son roceadas con productos químicos no deben ser consumidas. Los métodos más usados son los siguientes:
- Rodelización o estrés controlado: Es la técnica pionera a partir de la cual se lograron las primeras semillas feminizadas. El proceso busca estresar a la planta para que produzca flores macho, y en este caso, se logra causando su estrés por pH, nutrientes, temperatura o ciclo del fotoperíodo.
- Tiosulfato de plata o STS: En este caso la planta es rociada una sola vez con un compuesto químico que surge de la mezcla de nitrato de plata, tiosulfato de sodio y agua destilada.
- Plata coloidal: En este caso, la solución para rociar las plantas es preparada a base de agua destilada y una disolución de plata coloidal. Con la salvedad de que el rociado debe de hacerse de forma consecutiva por varias semanas hasta evidenciar la producción de flores macho.
Sin duda, las semillas feminizadas llegaron para quedarse, cada vez son más los coleccionistas y cultivadores aficionados que se inclinan por esta selección, aunque, es bien sabido que no son las más indicadas para los principiantes, pues requieren algo más conocimiento y experiencia para trabajar en estos cultivos. Sensoryseeds es uno de los bancos de semillas de mayor renombre en el mercado cannábico, pues ofrecen una amplia gama de productos derivados de esta planta y que gozan de consentimiento legal.