La amenaza de lluvia y el viento obligan a suspender las procesiones del Jueves Santo por la tarde

Ninguno de los cuatro actos previstos han salido a la calle durante este jueves por la tarde

L.N.C.
29/03/2018
 Actualizado a 18/09/2019
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Lo peor siguió por la tarde y la amenaza de lluvia y el fuerte viento obligaron en un primer momento a suspender las dos primeras procesiones previstas para la tarde: la Despedida del Cristo del Gran Poder y María al pie de la Cruz, camino de la Esperanza suspendieron sus salidas. El Gran Poder fue la primera cofradía en tomar la difícil decisión de no procesionar ya que las previsiones para las siguientes horas –salían del patio de las Hermanas Trinitarias a las 17:00 horas de la tarde– daban un 100% de probabilidades de lluvia y si las precipitaciones pillaban a media procesión no había posibilidad de poner a resguardo las tallas.

Acto seguido, la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades comunicaba de forma oficial que se suspendía por los mismos motivos la procesión de María al pie de la Cruz, Camino de la Esperanza, de la cofradía de María del Dulce Nombre, que celebró un acto en el mismo patio de los Capuchinos de donde salía la procesión y donde resguardaban sus tallas. Allí, las cofrades de esta penitencial formada exclusivamente por mujeres llevaron a cabo una oracióny bailaron uno a uno sus cuatro pasos ante la imposibilidad de mostrarlos por las calles de la ciudad.

Las agoreras previsiones que obligaron a suspender al Gran Poder y a las ‘Marías’ sus dos procesión se cumplían y pasadas las ocho de la tarde comenzaba a llover, a lo que se unió un fuerte viento que también ayudó a tomar la difícil decisión de no salir a unas calles de León que esperaban completamente repletas de gente a las comitivas.

Poco más tarde la suspensión de otra de las procesiones más esperadas de la jornada de Jueves Santo, la Sagrada Cena, que organiza la Hermandad de Santa Marta y que no pudo salir de la carpa instalada frente a la Catedral para resguardar las tallas.

Tampoco pudo salir la última procesión prevista para la tarde, la de las Tinieblas y el Santo Cristo de las Injurias, que obligó al Santo Cristo del Desenclavo a dejar también a cubierto sus tallas en los momentos en los que más llovió de toda la tarde. Sí realizaron en la Iglesia de Santa Marina la Real el ‘Oficio de las Tinieblas’ previo a la procesión y el Real Acto del Enclavamiento de Cristo, el último de ellos restringido exclusivamente para los hermanos de la cofradía.

Fue por tanto un Jueves Santo atípico, en el que ni cornetas ni tambores sonaron en una ciudad en la que en días como este es difícil poder ver todas las procesiones y actos previstos. Habrá que esperar al Viernes Santo para comprobar si el tiempo permite continuar con normalidad la Semana Santa leonesa.
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