José Luis Fernández: "Creo que ser lector sería mi profesión favorita"

A medio camino entre ‘Patria’, de Aramburu, y ‘Ardor guerrero’ de Muñoz Molina ("más quisiera yo, dice él") presenta este viernes en Tula Varona ‘Terciopelo azul’ (Eolas), un viaje a la memoria militar, los amores tormentosos y una sociedad marcada por el terrorismo

David Rubio
25/05/2022
 Actualizado a 25/05/2022
José Luis Fernández, escritor asturiano muy relacionado con La Vecilla.
José Luis Fernández, escritor asturiano muy relacionado con La Vecilla.
Asturiano vinculado a León, concretamente a La Vecilla, donde pasa los veranos desde hace años, José Luis Fernández es profesor de Literatura en Gijón, más lector que escritor, según él mismo confiesa, y debuta en la novela con ‘Terciopelo azul’ (Eolas), que este viernes presenta en la librería Tula Varona (calle Ruiz de Salazar, 18) a partir de las 19:30 horas.

– ‘Terciopelo azul’ aborda un tema como la difícil convivencia en una sociedad marcada por el terrorismo. Ahora parece que se ha perdido el miedo a tratar este tema, pero ¿era ya así en el momento en que decidió escribir la novela?    
– Sobre el tema de la convivencia en esos años, en el País Vasco, debo admitir que no es algo que mi novela pueda abarcar. Hay una mirada externa y asombrada ante los contrastes de esa sociedad en la que la violencia, la agresividad supremacista, quedaban disimuladas como si de un deporte rural más se tratara. El miedo a romper ese camuflaje creo que sí ha atenazado demasiados años a la cultura española.

– Alguien ha definido su libro como una mezcla de ‘Ardor guerrero’, de Antonio Muñoz Molina, y ‘Patria’, de Fernando Aramburu. ¿Está de acuerdo con esa definición?
– Solo que alguien compare mi novela con ese proyecto galdosiano de Aramburu ya me levanta varios pies del suelo. Comparto con ellos el paisaje. Muñoz Molina intenta describir una realidad y una institución que detesta. Pero está describiendo otra época y otra sensibilidad generacional. Aramburu con esa trilogía (‘Los peces de la amargura’, ‘Años lentos’ y ‘Patria’) da cuenta desde el interior de esa sociedad enferma y desquiciada.  En ‘Terciopelo Azul’ la mirada se produce desde fuera. Alguien ajeno a esa sociedad que intenta comprender… y no puede. Dicho esto, esa comparación sobre mi novela es de un poeta y narrador leonés a quien yo admiro hace cuarenta años, Julio Llamazares, a quien este libro debe mucho. Su generosidad me dio la oportunidad de sacar a la luz esta historia.  

– La memoria a través de la experiencia del servicio militar y el amor a través de la relación que inicia el protagonista. ¿Siguen siendo la memoria y las pasiones dos de los temas más universales y recurrentes de la literatura?
– Siempre. Y cómo el tiempo las va transformando y cambiando.    

– Usted es profesor de Literatura y buen conocedor de la obra muchos escritores. ¿Quiénes diría que son los que más le han influenciado?
– Yo lo que soy, ante todo, es lector. Sería mi profesión favorita. No puedo contestar acerca de la influencia que ejercen mis lecturas en el libro porque podría enunciar un tópico irritante. Pero sí, es verdad que ahí subyace todo lo que he leído de la Generación Perdida, de Carver, de Vázquez Montalbán, de José Ángel Valente, de… Eso, que somos animales lectores.      

– Como profesor de Literatura, ¿hay alguna época, generación o estilo que le guste especialmente impartir? ¿alguno al que en su opinión no se le esté dando la importancia que merece en los programas educativos?
– Los programas, al menos los de Literatura, no han cambiado tanto. Seguimos trabajando de forma muy parecida. No siento, para trabajar con ella, ninguna predilección por una época determinada. El reto es conseguir actualizarlas para un menor. Supongo que a eso se debía mi tendencia a convertir la literatura clásica o la medieval española en un western. Hasta que comprendí que mis alumnos ya no entendían tampoco la estética o la ética del western. Cualquier autor es bueno si consigues tocar alguna fibra del alumno con  él. Por favor, que alguien me diga cómo se hace con Manrique, cómo se explica el efecto del tiempo a chavales de 16 años. ¡Qué edad más dura para tener que soportar a profesores como yo!

– Si no me equivoco, nunca hasta ahora había publicado, o al menos no había publicado novela, pese a vivir muy de cerca la literatura. ¿Por qué se decidió a dar el paso ahora?
– Sí que he publicado artículos de opinión de vez en cuando; también algún trabajo de investigación sobre escritores olvidados. Narrativa, nunca. Quizás ‘Terciopelo Azul’ nace de esa experiencia docente donde yo he repetido durante 30 años la cita de Bernard Shaw. «El que sabe lo hace, el que no, lo enseña».  O de esa creencia en que todos albergamos, al menos, una historia digna de ser contada.  
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