Javier Sancho: "La pesca en los ríos leoneses tiene un gran futuro"

Después de casi tres décadas al frente del Servicio de Pesca en Vida Silvestre II, en la Delegación Territorial de la Junta en León, D. Francisco Javier Sancho Fernández dejaba esta semana su puesto vacante al cumplir la edad de jubilación.

Hombre afable, reservado y serio en su trabajo ha sabido ganarse el respecto de todos y en especial el del complejo mundo de la pesca. La figura de Javier Sancho no necesita presentación ya que como responsable de la Jefatura de Pesca de León le correspondió la organización de la Semana Internacional de la Trucha de León durante 26 años de los 51 que se han celebrado. También le tocó batallar y mucho con las directrices marcadas desde Valladolid no siempre acertadas con la singularidad de los ríos y la pesca de León.

Su defensa de la tradición e historia de la ‘pesca a la leonesa’ y predisposición para mejorar siempre los ríos y la pesca en la provincia quedarán en la memoria de los pescadores.

–¿Considera que ha contado con los medios suficientes para desempeñar su función?
–A lo largo de estos años en la Sección de Pesca, como en todos los ámbitos de la administración ha habido que irse amoldando a las circunstancias impuestas por la disponibilidad de presupuesto y llegar hasta donde ha sido posible, pero la limitación en los últimos años se ha hecho notar, manifestada en precariedad de medios en las labores de muestreos, estudios y vigilancia.

–¿Qué puede decir sobre la independencia en el trabajo desempeñado?
–La independencia es consustancial con la de funcionario público, y que no puede ni debe ser coartada por los vaivenes o intereses políticos, esto no siempre se consigue. La politización de las cuestiones técnicas no es positiva ni para la sociedad ni para el futuro.

–¿Se ha sentido apoyado desde la Consejería de Medioambiente?
–Los primeros años de vida de la Consejería fueron de una gran riqueza de iniciativas en materia de conservación de los recursos naturales: puesta en marcha de estudios hidrobiológicos y genéticos, de mejora en los ríos, Aulas del Río… Todo ello influenciado por responsables a nivel central, próximos, conocedores de los problemas y dispuestos a dar soluciones, hoy desgraciadamente hay una gran distancia entre las provincias y los núcleos de decisión.

–¿Cuál sería su valoración de todos estos años?
–Positiva, ya que, a lo largo de estos años de mi vida profesional, he tenido buenos colaboradores en compañeros y aficionados a la pesca, que me han dado grandes satisfacciones y amistad, así que siempre mantendré los buenos recuerdos.

–¿Cuál fue su peor y mejor momento?
–Los inicios quizás por la inexperiencia y por el reto de afrontar una tarea que entendía difícil, pero los buenos momentos, que han sido muchos, hacen olvidar aquellos.

–¿Cómo ve el futuro de la pesca en nuestros ríos?
–Hay sin duda un gran futuro, ya que tenemos un mejor conocimiento de los problemas que afectan a nuestros ríos, tanto los responsables como la sociedad y se está en condiciones de poder afrontar soluciones, y sobre todo hay una gran riqueza y capacidad de recuperación en los ríos.

–¿Qué mensaje trasladaría a los aficionados a la pesca?
–Que aficionados y gestores sean capaces de hacer llegar a la sociedad que el ecosistema acuático es muy frágil y que toda intervención que se realice en el medio tiene consecuencias determinantes que pueden llevar al fracaso de todo el esfuerzo de gestión.

–¿Qué va a echar de menos de este trabajo?
–El estar en el día a día en un trabajo que me ha ocupado casi toda mi vida profesional y también dado muchas alegrías y buenos recuerdos.

–¿A qué se va a dedicar ahora?
–Dedicar más tiempo a mi familia a la que debo tanto, ir a los ríos leoneses, disfrutar de ellos como aficionado y cuando llegue la temporada pescar ‘a la leonesa’. Quiero agradecer a que el destino me trajera a tierras leonesas, trabajar en ellas y con los leoneses, el haber podido contar con la colaboración de todos, pescadores, Federación y sociedades, y muy especialmente mis compañeros en labores técnicas y administrativas, Agentes Medioambientales y Vigilantes de Pesca, cuya colaboración ha hecho posible mi tarea. Gracias amigos.