Invierno con vino caliente

Si hay una cara positiva de la nieve —que tiene otras muchas— y su genérico el invierno, ésta es a buen seguro la artística, fundamentalmente la fotográfica. No hay más que atravesar estos días las comarcas de la montaña leonesa para comprobar que es un auténtico laberinto de fotógrafos de todo tipo, de profesionales a la antigua usanza a los habituales del móvil.

Una buena selección de imágenes de invierno y todo su atractivo puede visitarse (hasta el día 28 de diciembre) en las paredes del bar Villamor de Riello, donde tienes la ventaja de que el invierno queda afuera y solo convives con sus estampas, una especie de invierno con vino caliente y azúcar, que ha sido la bebida más propia de estos días de nieve y frío.

Las imágenes que pueden verse pertenecen a los alumnos de los talleres de fotografía de las Ceas del Ayuntamiento de León que imparte un clásico del género, José Luque. Esta muestra, que no podía tener otro título que Invierno, permite a estos aspirantes a fotógrafos -Fernando Redondo, Sonia Rubín...- cumplir una de las aspiraciones que albergas al acudir a un taller, poder exponer los frutos de los trabajos realizados.

Un examen con vino.