Incosa, de la 'quiebra' a líder autonómico de energías renovables en tres años

Con motivo del tercer aniversario del cambio en el accionariado de Incosa, el consejero de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha visitado las instalaciones de la compañía en el Parque Tecnológico de León. Según ha expresado durante el acto, el presidente de Incosa, Gerardo Gutiérrez, su empresa vivía una "situación crítica" hace tres años de la que pudo salir gracias a una inversión familiar y el apoyo financiero de la institución autonómica.

El cambio accionarial se sumó a los préstamos participativos de la Junta y logró salvar 350 empleos, 90 de ellos en la comunidad autónoma, en los centros operativos que Incosa mantiene abiertos en León y en Boecillo (Valladolid). "La compañía salió del bache y hay que reconocer el papel que tuvo la Junta en ello hace tres años", ha apuntado Gerardo Gutiérrez en la visita del consejero.

Por su parte, Fernández Carriedo ha puesto en valor los procesos "respetuosos con el medio ambiente" que se llevan a cabo en Incosa, compañía que ha logrado consolidarse como la mayor ingeniería de la comunidad autónoma gracias a su apuesta por las energías renovables. A pesar de su punto de inflexión en 2018, Incosa lleva 36 años de trayectoria pasando de ser un pequeño laboratorio de control de calidad ha una multinacional que opera en más de una treintena de países y tienen sucursales en Colombia, Perú y Nicaragua.

Incosa cerró el pasado año con una facturación de más de 17 millones de euros, ahora en 2021 busca consolidarse a pesar de la crisis económica derivada de la pandemia del Covid-19. "Esta situación ha afectado a todas las empresas, pero ha venido en un momento en el que la compañía había hecho los deberes desde el punto de vista financiero, lo que le ha permitido acceder a recursos suficientes para soportar el período de descenso de actividad", valora el consejero delegado, Javier Cid.