Director: Jordan Peele
Intérpretes: Daniel Kaluuya, Keke Palmer, Brandon Perea, Steven Yeun
Género: Fantástico-terror
Duración: 130 minutos
'¡Nop!' no es tu típica película de ciencia ficción. Sí, no puede haber nada más típico en cualquiera de estas películas que un platillo volante , ¿pero que con este se construya una metáfora sobre la industria del espectáculo y más concretamente una crítica hacia el Hollywood moderno? Eso es algo que no se ve todos los días, «Nop» señor.
Hoy en día no hay muchos en el propio Hollywood dispuestos a producir una película se semejante presupuesto , unos 68 millones de dólares, aún distantes de la media de 200 millones que vienen costando las últimas grandes superproducciones de Marvel; sabiendo que no va a conseguir recaudar tanto como estas. «¡Nop!» ha recaudado unos tímidos 160 millones de dólares en taquilla en comparación con películas como ‘Thor: Love and Thunder’ y sus cerca de 750 millones de recaudación, a pesar de las notables deficiencias de esta última, tanto argumental como visualmente, pero ese ya es otro tema. Sin embargo, aún hay algunos productores y directores que se resisten a la canibalización de las grandes producciones y que tratan de mantener viva la originalidad y el amor por un arte que en la última década se ha visto relegado a las pequeñas producciones para evolucionar, dejando la gran pantalla para ser explotada. Entre ellos se encuentra Jordan Peele (‘Déjame salir’ , ‘Nosotros’) quién empezó su carrera como comediante y dio el salto a la dirección en 2017 con la aclamada ‘Déjame salir’, que se convirtió en un fenómeno mundial y en un soplo de aire fresco para el cine de terror , con un presupuesto de solo 4,5 millones de dólares y recaudando más de 250. Peele es un director que ha demostrado saber contar buenas historias con recursos mínimos , y con ‘¡Nop!’ demuestra de lo que es capaz con juguetes nuevos.
Todo este presupuesto se ve reflejado, entre otros aspectos, en la inmensidad de sus escenarios y en la calidad de sus efectos visuales y de su sonido, que la vuelve una experiencia verdaderamente intimidante en el cine haciéndote partícipe de la escala y la proximidad de la amenaza que se cierne sobre los protagonistas. Una de las mayores fortalezas de ‘¡Nop!’ recae en su excelente dirección de fotografía, que puede llegar a recordar a la vista incluso en el cine de Christopher Nolan , no es casualidad, ya que está a cargo de Hoyte van Hoytema, habitual colaborador de este director cuyas obras están repletas, al igual que ‘¡Nop!’, de inmensos planos generales con una imagen de gran calidad; que con este último trabajo ha revolucionado el modo de rodar escenas nocturnas , combinando metraje rodado película típica de 35mm con otro capturado por cámaras infrarrojas, pudiendo capturar así las numerosas escenas de noche como si estuvieran iluminadas por la luz natural de la luna, dotándolas de una calidad nunca antes vista en el cine.
Ya en sus primeros tráileres, ‘¡Nop!’ denotaba la influencia de grandes directores como Steven Spielberg, el director de películas de acción y aventura por antonomasia , cuyas obras más «extraterrestres» , como ‘E.T.’ o ‘Encuentros en la tercera fase’ , parecerían ser la mayor influencia en una película de ovnis como es ‘¡Nop!’. Pero sorprendentemente está guarda aún más similitudes con ‘Tiburón’ y su lucha entre el hombre y la bestia. Pero si hay algo que tanto Peele como Spielberg aquí comparten es el planteamiento del suspense, jugando con lo que el espectador y los propios personajes no ven , con varias secuencias que se toman su tiempo para desarrollar una incertidumbre que finalmente remata con momentos que rozan el terror y que harán saltar de su butaca a más de uno.

Sin embargo, ‘¡Nop!’ dista de ser perfecta, tarda en centrar su trama, sus personajes tienen motivaciones en ocasiones más que cuestionables y no se atreve a ser más violenta , lo cual ayudaría a incrementar aún más el terror del que sabe hacer gala en sus escasas escenas más sangrientas y asfixiantes, donde realmente se siente la monstruosidad de a lo que se enfrentan los personajes y las consecuencias terribles de tratar de aprovecharse de aquello que no se comprende.
En definitiva, quien vaya al cine esperando la típica película de marcianos palomitera va a salir decepcionado y puede que incluso confundido, pero aquel que disfrute de sus referencias , de la acidez en su crítica a la industria del cine actual y de su impresionante apartado técnico la disfrutará tanto como se merece esta fresca adición al género de la ciencia ficción.