Histeria yihadista

Calma. Llegó el famoso fin de semana en el que todos los centros comerciales de León están en alerta máxima por amenaza de atentado. Calma, no saquemos tan pronto los tanques. Qué fácil es sembrar el pánico. Antes al menos hasta que te enterabas de la noticia pasaba un poco más de tiempo. Ahora con esto del Whatsapp es más cómodo crear histeria colectiva. Hace unos días me llegó un mensaje al móvil alertándome de esto: «Me acaba de llamar una amiga. Su marido trabaja en el CSIC y con policía, hay una amenaza fuerte de atentado en el Corte Inglés, no es broma». Como veis, todo fuentes muy concisas y fiables. La verdad es que nosotros, los periodistas, tampoco hemos ayudado mucho en este asunto. En seguida se han podido leer titulares aludiendo a cómo la Guardia Civil saca a la calle a sus cuerpos especiales ante la amenaza yihadista. Y no sólo aquí. En plena plaza de Sol en Madrid se puede ver a varios policías armados vigilar la zona. Infunde respeto, la verdad. Y un poco de miedo.

Sí que es cierto que tras el atentado al Charlie Hebdo se ha puesto en marcha el nivel 3 (baja intensidad) del plan de Prevención y Protección Antiterrorista a nivel nacional. En León esto se traduce en un refuerzo de los dispositivos de vigilancia y controles del tráfico, como el realizado ayer en la autovía León-Benavente. Pero tranquilos, que ya se encargaron los cachondos de la Policía Nacional en su súper cuenta de Twitter de desmentirlo todo y poner un poco de paz. «Somos haters de los bulos absurdos y las falsas amenazas. Ódialos fuerte. Vamos, que ni caso», rezaba uno de sus tuits. El subdelegado del Gobierno en León también quiso aclararlo asegurando que no existe ninguna amenaza específica en la capital por terrorismo. Aun así, a la gente que no tiene más que hacer que asustar a los muchos crédulos de este país –yo incluida– ya os vale. Que no hay nada peor que la duda. ¿Y si es verdad, qué? Mejor nos quedamos en casa. Ese «y si…» nos mata. Creía conveniente aclararlo hoy. Por si más de uno no ve las redes sociales o todavía sigue con el miedo en el cuerpo. Así que, amigos leoneses, vayan tranquilos a hacer sus compras. Acudan sin temor a los centros comerciales, esos que tanto nos gustan aquí.