Hay que tener en cuenta que las del pasado estaban influenciadas de una u otra manera por la pandemia del coronavirus y las restricciones para hacerle frente, pero lo cierto es que las carreteras leonesas se han cobrado desde enero y hasta el pasado martes más vidas que en los doce meses anteriores.
Así se desprende de los datos facilitados a este periódico desde la Dirección General de Tráfico (DGT), que cifran en 15 los accidentes mortales que se han registrado en la provincia de León durante este año y en 17 las personas que han perdido la vida. «La cosa no está yendo bien», admiten.
El dato contrasta con las nueve muertes que se contabilizaban a estas alturas del pasado año (con el mismo número de siniestros). Y aunque a priori esto se podría achacar a la reducción de la movilidad por las limitaciones para hacer frente a la pandemia, lo cierto es que el dato a 10 de agosto de 2019 más bajo aún, puesto que la estadística refleja seis accidentes mortales con un total de siete fallecidos en carretera.
De hecho, los 17 fallecimientos en lo que va de año suponen el dato más cruel de la última década, tal y como puede comprobarse en la tabla que acompaña a esta información. A estas alturas del año 2018 había 10 víctimas mortales y, si echamos la vista más atrás, encontramos las 11 de 2017, las seis de 2016, las 14 de 2015, las 14 de 2014, las siete de 2013 y las nueve de 2012, siempre según los datos que facilita la DGT.
Cabe recordar que el último accidente mortal tuvo lugar durante la madrugada del pasado martes, cuando una mujer falleció y un hombre de 80 años de edad resultó herido después de que su turismo chocara con una máquina de obras. El siniestro tuvo lugar en el kilómetro 172 de la autovía A-66 en sentido Benavente, a la altura del municipio de Villamañán. Esta vía se encuentra actualmente en obras impulsadas por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para la renovación del firme y el servicio de emergencias solo pudo confirmar el fallecimiento de la mujer y trasladar al hombre en ambulancia de soporte vital básico al Complejo Asistencial Universitario de León.
El más grave, en La Antigua
Pero el accidente más grave en lo que va de año se producía el pasado 6 de junio. Dos personas perdieron la vida y otras cinco resultaron heridas –entre ellas un menor– en una colisión lateral de dos vehículos en un cruce regulado por un stop en el término municipal de La Antigua. Las dos personas fallecidas eran el conductor y el ocupante del vehículo impactado. Se estima que el otro vehículo, en el que viajaban los cinco heridos, no respetó el stop. Pocas horas después, fuentes de la Delegación del Gobierno en Castilla y León confirmaron que este siniestro estuvo causado por una tasa de alcoholemia superior a la permitida, una velocidad inadecuada y una conducción distraída.Es preciso destacar además que al menos cinco de las 17 víctimas mortales que dejan las carreteras de la provincia desde principios de año eran motoristas y que ha habido otros muchos accidentes protagonizados por este colectivo que se han saldado con heridos de diversa consideración.