Garzón recomendó al senador que lea sus declaraciones sobre este asunto al diario británico ‘The Guardian’ con el fin de "debatir sobre el fondo y el contenido” de las mismas, y subrayó que se “reafirma” en “todo aquello” que dijo en su entrevista, si bien reiteró que, “naturalmente”, no tiene “nada que decir” sobre aquello que no dijo.
En su dúplica, explicó que Izquierda Unida lleva “más de 35 años contrastando opiniones, debatiendo, discutiendo de política” y mantiene con los ‘populares’ “suficientes discrepancias como para que vengan a inventarse una nueva”. A este respecto, incidió en que en sus declaraciones se refería a “un modelo muy específico” como es el de las macrogranjas, e insistió en que se trata de “un modelo absoluta y crecientemente cuestionado por muchas dimensiones y por muchas instituciones”, al entender que “condensa una crisis ecológica, una crisis económica y una crisis social”.
En este sentido, hizo hincapié en que las macrogranjas “están desplazando, por ejemplo, a los ganaderos de la ganadería social, familiar, tradicional y extensiva”. “Esos mismos a los que usted dice que defiende están perdiendo cuota de mercado en beneficio de las macrogranjas, que son propiedad normalmente de familias adineradas y de fondos de inversión”, abundó, para señalar también el “perjuicio social” que llevan aparejado, convencido de que “no solo no arraigan población al territorio, como sí hace la ganadería tradicional, sino que, muy al contrario, lo que hacen es desplazarla”.
En esta línea, explicó que “uno de los efectos” que produce ese tipo de modelo agroindustrial es “el de los olores”. “Y la gente no quiere quedarse en esas poblaciones, entre otras cosas, por esas razones y muchos pueblos están en esa circunstancia”, añadió, para, a continuación, advertir también sobre la contaminación ecológica “adicional” que suponen a causa del proceso de eutrofización o contaminación de los suelos y del agua que producen y que, a su juicio, “hace que muchos pueblos no tengan agua potable o esté amenazado su suministro”.
Por todo ello, admitió que le “sorprende” que el PP “esté esquivando este tema”, que juzgó “de enorme importancia, incluso para diputados y cargos públicos del Partido Popular” que, espetó, en la pasada campaña electoral de Castilla y León "han llegado a visibilizar lo que podríamos llamar la paradoja Schrödinger de la ganadería". "Han dicho que las macrogranjas no existen, al tiempo que muchos cargos públicos del Partido Popular a lo largo de toda España estaban manifestándose contra esas macrogranjas”, destacó.
Propaganda, bulos y mentiras
“Esto significa que ustedes están evitando un problema real y evitando, por lo tanto, solucionarlo simplemente para hacer propaganda a través de los bulos y las mentiras”, sentenció, para aseverar que el senador ‘popular’ “lee la prensa de extrema derecha, se come el bulo y los votos los reciben otros”.
Por su parte, el parlamentario del PP afeó las declaraciones de Garzón al diario británico dado que, según su punto de vista, “afectaban de manera negativa a España” y eran “unas declaraciones impropias de un ministro de España”. “Unas declaraciones que hicieron daño a la marca España, que hicieron mucho daño a miles de familias que producen en este sector cárnico y que hicieron un enorme daño a un sector pujante en España, que exporta a 130 países por un valor de 9.000 millones de euros y en el que trabajan 2,5 millones de personas”, detalló.
Asimismo, lamentó que dichas declaraciones también “han tenido un efecto totalmente negativo con los profesionales del sector”, entre los que citó a ganaderos, veterinarios e ingenieros agrónomos, que, a su entender, “hacen un trabajo eficaz, aplicando la normativa existente y lo que se exige en cuanto a sanidad animal, bienestar animal, calidad y sanidad alimentaria” que, dijo, “justamente es lo que nos ha abierto las puertas a los mercados exteriores”.
Tras opinar que el presidente del Gobierno tendría que haberle cesado “fulminantemente”, criticó que Pedro Sánchez “prefiere proteger a los comunistas en vez de proteger a nuestros ganaderos”. “Hasta el comisario europeo le dijo a usted que la carne que se produce en España es una carne de calidad y al señor Planas le dijo que había que dejar de criminalizar ya a la ganadería”, recordó a Garzón, para preguntarle si no le da “vergüenza” del daño que “está haciendo a nuestros ganaderos”.
“En España no se produce carne de mala calidad, hay ministros de mala calidad, como usted; en España nuestros ganaderos no maltratan a sus animales, en España es el Gobierno el que maltrata a nuestros ganaderos y en España tenemos un Gobierno socialista y de Podemos que prefiere proteger al lobo que proteger a nuestros ganaderos”, manifestó, para exigir a Garzón que pida “perdón” a los ganaderos “si tiene un poco de vergüenza y un poco de dignidad”, que confirme que en España "se produce carne de altísima calidad y que los ganaderos son los mejores productores de carne de España” y deje de "criminalizar a los agricultores y ganaderos".