El acto de presentación contará con un breve recital por parte de la pianista Raquel del Val, que conoció al maestro Odón Alonso en los años en que cursó estudios de Grado Superior de Piano en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid y que para la ocasión interpretará dos obras del llamado virtuosismo de temática española, como son la ‘Jota de Concierto’ de Joaquín Larregla y ‘Recuerdos de Andalucía’, del músico estadounidense Louis M. Gottschlak.En opinión de su autor, ‘El maestro Odón Alonso en el recuerdo’ es un libro muy interesante desde el punto de vista de que son sus amigos y compañeros de profesión los que hablan de Odón. Pérez Ruano reconoce que el libro anterior, resultado de su segunda tesis doctoral, es un libro más científico, que exigió un trabajo de investigación enorme reflejado en sus 1.660 páginas y que supone un exhaustivo estudio y análisis de toda su actividad artística. «Este tercer libro es como culminar una trilogía, aunque no sé si es correcto decirlo porque yo en ningún momento pensé hacer tres libros de Odón Alonso, pero sí que es cierto que cada uno tiene un perfil distinto y este son los amigos y compañeros de Odón digamos que imponen su testimonio al servicio de mi entrevista y mi conversación pues para plasmar sus inquietudes, sus opiniones, sus recuerdos sobre lo que fue Odón Alonso y lo que significó su figura artística para el mundo de la música española».Fernando Pérez Ruano reconoce que todos los entrevistados le recibieron encantados en sus respectivos domicilios para verter sus opiniones sobre el músico bañezano. «Estoy hablando de Luis de Pablo, de Cristóbal Halffter, de Antón García Abril, de Enrique García Asensio... que han sido extraordinariamente sinceros a la hora de responder a mis preguntas. Yo no soy periodista pero algunas de esas preguntas no era fáciles de responder y sin embargo ninguno de ellos eludió la pregunta. Todos ellos fueron muy amables conmigo y todos pusieron en su justa medida en su sitio al maestro Odón Alonso. Y el sitio del maestro Odón Alonso y tras la lectura del libro es de categoría de honor», sostiene el autor.
Preguntado por lo que un compositor siempre exige de un director de orquesta a la hora de enfrentarse a alguna de sus obras, Pérez Ruano señala que «un compositor lo que quiere es que el director de orquesta entienda lo que él ha escrito en sus pentagramas y sepa transmitirlo a los músicos para que al final suene esa idea que el compositor ha querido plasmar en ese lenguaje tan imperfecto que es el solfeo, el lenguaje de la música y su escritura. En este sentido, los compositores encontraron en la figura del maestro Odón Alonso el mejor medio de transmitir la idea y el pensamiento musical del compositor a través de la orquesta hacia un público. Y si no hubiera sido así, el maestro Odón Alonso no hubiera hecho la cantidad de obras de estreno que hizo de los músicos coetáneos a él, de los que estudiaron con él, y de otras tantas obras que hizo interpretaciones en primera audición en España y sobre todo con algunas de las orquestas de las que fue titular».Le recuerdo a Pérez Ruano que desde nuestra última conversación son varios los compositores que nos han dejado, como Cristóbal Halffter, Antón García Abril, Luis de Pablo... «Se nos han ido marchando y además a marchas forzadas porque en un año hemos perdido a tres. Este año 2021 se han ido lamentablemente Cristóbal Halffter, Antón García Abril y Luis de Pablo. Anteriormente también habían fallecido dos directores de orquesta cuyo testimonio también se recoge en el libro. Uno es el archiconocido mundialmente, Rafael Frühbeck de Burgos, y el otro quizás un poco menos conocido para un público menos melómano que se llamaba Miguel Roa».
También le comento que en una entrevista que tuve ocasión de hacerle a Antón García Abril le pregunté por su relación con la música aplicada a la imagen, al haber compuesto bandas sonoras de películas y sintonías de programas de televisión, algunas tan memorables como ‘El hombre y la tierra’, y su respuesta no fue muy entusiasta. De hecho aseguró que no tenía sentimiento de pertenencia al mundo del cine. «Es interesante eso que dices y te voy a responder, si me permites, con palabras del propio Odón Alonso, que puso música a seis películas y en cierta ocasión le pregunté para el primer libro que cómo no había compuesto más música para el cine. Su respuesta es que no tenía nada que decir porque la música para el cine es otra cosa, pues el argumento te lo dan hecho. También es algo que le pasaba a Cristóbal Halffter y a Luis de Pablo. En un momento bastante dilatado de la historia de la música española el compositor de alguna forma se ha tenido que agarrar a aquello que le ha podido reportar un beneficio económico, y en este caso el mundo cinematográfico en algún momento sí que ha sido una vía profesional para algunos compositores. Pero el compositor que normalmente hace sinfonías, conciertos y que hace óperas, como Halffter o García Abril, el mundo de la música incidental digamos es un mundo que lo han practicado y que seguramente les haya dado mucha más fama que a lo mejor una ópera, un concierto o una sinfonía, pero no es el género compositivo en el que ellos se sienten más cómodos», sostiene Pérez Ruano, que a la pregunta de si aún le quedan más publicaciones en torno a la figura del músico bañezano, su respuesta es que «creo que me quedan dos posibles libros por escribir sobre el maestro Odón Alonso. Uno no sería del todo original porque después de una tesis doctoral imagínate lo original que se puede ser. Pero sí que me gustaría escribir una biografía ilustrada del maestro. Y la segunda cuestión, y quizás dé ideas a algún musicólogo o a algún doctorando que esté dudando por qué tema enfocar su futura tesis doctoral, hay dos figuras muy importantes en el mundo de la música leonesa, uno es Odón Alonso González y el otro es Odón Alonso Ordás; es decir, padre e hijo. Sí que me gustaría para el año 2025, en el que se cumple el centenario del nacimiento de Odón Alonso hijo y el 125 aniversario del nacimiento de Odón Alonso padre, hacer una publicación poniendo a estas dos grandes figuras de la música leonesa digamos en un paralelismo, porque no olvidemos que si Odón Alonso fue un gran artista a nivel nacional e internacional gracias al momento histórico que vivió y a las orquestas institucionales que dirigió, como la Orquesta de RTVE por ejemplo, el maestro Odón Alonso González en esa España de posguerra, con unas limitaciones absolutamente abrumadoras en todos los sentidos, sacar adelante un proyecto musical, crear un orfeón y después crear una orquesta y hacer que esa orquesta tuviera un ciclo de actividad durante tantos años como llegó a hacerlo, eso tiene un mérito y un valor que hay que ponerlo en negro sobre blanco, como se suele decir, porque hay que poner en valor a los grandes artistas de este país y a los grandes artistas de León», concluye Pérez Ruano.