Fasgar y la bienvenida al Bierzo

El Camino Olvidado se introduce en la comarca berciana a través de Igüeña en la octava etapa en León atravesando lugares cargados de historia y leyenda como la Campa de Santiago y Colinas del Campo de Martín Moro Toledano

D.M.
11/01/2021
 Actualizado a 11/01/2021
Paso por la localidad de Colinas del Campo.
Paso por la localidad de Colinas del Campo.
Está mal que yo lo diga, pero la etapa Fasgar-Igüeña es la etapa reina del Camino Olvidado. Es la opinión de muchos peregrinos», reconoce orgulloso el alcalde de Igüeña, Alider Presa. Esta etapa octava en la provincia sale de Fasgar y da la bienvenida a la comarca del Bierzo. Es en la que el Camino Olvidado se adentra en tierras bercianas a través de la montaña, la sierra de Gistredo, un recorridopor torrentes, cascadas, fuentes, árboles, diversas flores y plantas raras. Está especialmente indicada en verano, indica el alcalde «ya que podemos hacer casi toda la etapa a la sombra, río Boeza abajo». Con algunas dificultades, podría realizarse también en bici. Hay que tener en cuenta que es una etapa de montaña. Distinta, pero preciosa, explica Presa.

Se inicia la marcha por una pista ancha y con buen firme, la cual se va empinando considerablemente, durantetres kilómetros. Allí aparece la Fuente del Abedul, con tres caños y unos versos grabados. Enseguida,la cima del collado, situado a 1641 metros con unas vistas fantásticas hacia gran Campo de Santiago circundado de altas montañas, que rondan los dos mil metros.

A continuación, fuerte bajada siguiendo el ancho camino que en ocasiones presenta el suelo muy pedregoso hasta la ermitabajo la que se halla la Fuente Santiago. Una leyenda dice que habiendo bebido en ella no enfermas en el resto del año. En la campa se dirimió una gran batalla en el siglo X entre las tropas de Ramiro II de León y las huestes de Almanzor, comandadas por Martín Moro que ha pasados los siglos cubriéndose de leyendas. Actualmente el lugar transmite una inmensa sensación de paz.

La ruta sigue por una senda más estrecha entre los meandros del Río Boeza, y que dependiendo de la fecha puede ofreceralguna dificultad. Un monolito del Camino Olvidado marca ellimite de ambos valles.
A continuación se inicia el descensode seis kilómetros por una cañada, las ruinas de lo que fue el hospital deperegrinos, elbosque de tejos y acebos delPaleiro, los puentes de Salgueirón y Las Palombas y árboles que llegan a conformar túneles de sombra.

Espectacular la llegada a Colinas del Campo Martín Moro Toledano, un Conjunto Histórico de Interés Cultural, con bares, tiendas y también lugares para dormir. Allí hay que cruzar el puente romano sobre el Rio Boeza y salir Igüeña pasando por debajo de un arco que forma parte de la ermita de Santa Dorotea.

Esta parte de la ruta será también por una pista ancha y de buen firme por una zona donde el agua es protagonista, de vegetación exuberante hasta salir a la carreteraque hay que seguir hasta Igueña.

Un moderno albergue con todas las comodidades recibe al peregrino.Los últimos años, restando el último 2020, han sido de continuo crecimiento de peregrinos. «Quien hace el Camino y lo repite, suele elegir otras alternativas, como es ésta. Y merece mucho la pena», señala el alcalde de Igueña.


La guía, con La Nueva Crónica hasta el día 17

La Nueva Crónica suma su apoyo para que esta histórica ruta jacobea deje de estar olvidada. Por ello, ha publicado la guía de ‘El Camino Olvidado de Santiago’ escrita por David Gustavo López y Ramón Gutiérrez de Pro-Monumenta. Se trata de un recorrido por las doce etapas que recorren la provincia de León por algunos de sus parajes más hermosos y también más desconocidos. Una guía, que podrá adquirirse por 9,95 euros hasta el domingo 17 de enero con La Nueva Crónica para no perderse ni un detalle de su paisaje, su patrimonio, y las curiosidades que aparecen en el recorrido a Compostela más insólito.
Archivado en
Lo más leído