Extremadura y Ponferradina repartieron los puntos con sendos tantos de penalti, anotados por Nono y Yuri, en un partido en el que el control del balón fue de los bercianos y algunas de las mejores ocasiones de los locales, la mayoría de ellas por errores puntuales de los visitantes. Al final, un empate que puede considerarse justo por los merecimientos de uno y otro aunque buscados por caminos muy diferentes.No salió mal la Ponferradina al comienzo. Durante toda la primera parte el juego estaba controlado siempre por los blanquiazules, en esta ocasión con su segunda equipación. Su dominio del partido comenzaba con la línea formada por Larrea y Sielva, que fue muy superior a la de los locales, lo que les permitía tener más tiempo el balón y que rondara en más ocasiones por la portería local defendida por Casto y no concediendo demasiadas oportunidades al Extremadura.
Los locales tuvieron mejores ocasiones por algunos errores cometidos por la zaga de la Ponferradina Sin embargo, la primera llegada clara fue determinante, ya que a los doce minutos Pinchi superaba al central de ‘emergencia’, Maxi Villa, que hacía un claro penalti y Nono anotaba el tanto que inauguraba el marcador en el choque.
Ese gol no cambió para nada el esquema de ninguno de los equipos y por lo tanto el desarrollo del partido se mantuvo por los mismos derroteros. La Deportiva contabilizaba una llegada tras otra. La primera tras un jugadón de Ríos Reina que no tuvo rematador, la segunda tras otro eslalon de Isi sorteando contrarios a cuyo centro no llegó Kaxe por poco. En el minuto 33 de este primer periodo vivió una auténtica locura primero porque el Extremadura pudo haber duplicado su renta tras un error de Manu García, que no se entendió con Maxi Villa, y sin portero Pinchi no aprovechó la ocasión al enviar el balón fuera, pero nada más sacar, una jugada de viveza de los bercianos permitía a Pablo Valcarce, tras un gran recorte, situarse en una posición privilegiada pero su disparo fue al cuerpo de Casto cuando tenía el otro lado totalmente favorable para sus intereses. Fue sin lugar a dudas la mejor ocasión para empatar que tuvieron los de Bolo, que concluyeron la primera parte sin poder hacerlo pese a mantener el dominio, ya que no crearon demasiadas llegadas con peligro, pero verdaderamente tampoco las concedieron en un tramo final con mucho ida y vuelta en las zonas menos peligrosas.
Tras el empate los dos equipos buscaron adelantarse pero más por empuje que por juego El tiempo de descanso no afectó demasiado al cuadro berciano ya que no había hecho muy mal las cosas salvo un par de errores defensivos en los que concedieron un gol y a punto estuvieron de permitir otro. De esta forma buscaron mantener el mismo estilo para buscar con el control el empate. Pero el que sí cambió las cosas fue el conjunto local, que tuvo mayor profundidad y en cinco minutos pudo volver a marcar, primero Ledesma tras ganar la espalda a Maxi Villa pero se le fue alto. Luego Pinchi mandaba al larguero una gran jugada de Nono y el rechace lo remataba Cristian haciendo un paradón Manu García. Cerraba esta trilogía un mal control de Willy Ledesma en una situación inmejorable.
Esa situación en tal corto periodo de tiempo provocó que Bolo reaccionara empezando el carrusel de cambios. Primero quitaba de la ecuación a un Larrea amonestado haciendo saltar al campo a Manzanara, y cuatro minutos después era Yuri el que entraba al terreno de juego por un batallador pero poco incisivo Luis Valcarce.
De nuevo Isi fue determinante en las mejores jugadas bercianas, incluida en la que llegó el penalti Sin embargo de nuevo era la figura de Isi la que daba el toque de calidad ofensiva para conseguir el tanto del empate. Un gran disparo suyo fue detenido por Casto, pero en vez de rechazar hacia el exterior dejaba el balón muerto en el área y llegaba Kaxe para marcar tras ser derribado por el portero. Después de revisar la jugada por el VAR se anulaba el tanto por mano del delantero y se pitaba el penalti. El encargado de su ejecución era Yuri, en lo que era el primer balón que tocaba, y anotaba un nuevo gol en su cuenta particular, eso sí, con suspense ya que estuvo a punto de pararlo el portero del Extremadura y entraba llorando.
Desde ese momento hasta el final del choque lo intentaban los dos equipos con más coraje que buen juego. Los locales bombeando muchos balones tras haber cambiado a sus atacantes y los bercianos encomendándose a Isi, pero pese a tener aproximaciones ninguno de los dos lo conseguía y se mantenía el empate que permite a los dos equipos seguir en la zona templada de la clasificación de Segunda División.