Estoy muy a gusto solo

Esta semana se ha hecho viral el vídeo de un joven asturiano de trece años, que vive en Yernes y Tameza. El chico, único niño en este municipio asturiano, contestó con insólito desparpajo a la pregunta de si quería que hubiese algún niño más en el pueblo: «Estoy muy a gusto sólo, no quiero que nadie me toque los cojones». A raíz de este reportaje de la Sexta en la que se mostraba la vida del mundo rural, y el gran problema que sufrimos muchas provincias, que no es otro que el del abandono del mundo rural y la despoblación.

Escribía ayer la temida Negrilla, que pensaba que lo de lavar los trapos sucios fuera de casa, era sólo ‘made in León’, como lo de saludar levantando las cejas.

Algo parecido pensé cuando vi al joven Adrián explicarse con semejante espontaneidad, y mostrando lofeliz que era en el pueblo sin que nadie fuera a darle ‘chaqueta’. Salvando las distancias, algo parecido respondería yo si me preguntasen, sobre todo cuando me dispongo a tomar mi café cortado, ese momento íntimoen el que echo cable a tierra tan sólo tres minutos, cortos pero intensos, de encefalograma plano, sin pensar, oír, ni hablar.

Y es que aquí en nuestro querido León hemos sufrido muchos Adrianes, sólo que con el doble o triple de años. Muchos han sido los alcaldes que no han querido arreglar la carretera que lleva al pueblo, por miedo a que los domingueros que vienen a pescar se lleven las truchas, o en el peor de los casos, que les guste el pueblo y vengan cada festivo a comer al bar, se llene el pueblo de coches y estresen al ganado.

El joven Adrián bien podría haber sido un chico de cualquier pueblo de León, no les diré nombres, pero varios son los que me vienen a la mente. Y como pasa siempre, y más en estos tiempos tan bajos de moralidad y ética, no ha faltado quien, aprovechando las palabras de Adrián, se ha atrevido a cuestionar el modo de vida de un chico del que no saben absolutamente nada. También muy de León el prejuzgar, y por consiguiente, el pontificar.

No sé cómo vivirá y se encontrará Adrián en el pueblo,levantándose muy pronto para ir al colegio a otro municipio y ayudando a sus padres en las tareas rurales.

Sus padres dicen que el niño está feliz en el pueblo y que la gente habla sin saber al criticarles, y es quesólo con verle se puede afirmar que de ningún modo es uno de los 333 ‘nini rurales’ fuera del sistema educativo, que se beneficiarán del plan León Activo y Activa León que se implantará en nuestra provincia de la mano de la diputación.