"Este virus lo ha sacudido todo"

Tras 14 años apostando por el pilates como medio de vida y llevando su práctica por toda la comarca, la pandemia le obligó a replantear su negocio que se convirtió en una necesidad para sus alumnos. La incursión en la virtualidad parece haber sido la clave para Somoza, un camino que ya no tiene final.

-¿Qué ha supuesto la pandemia para usted y su colectivo?
-Sobre todo, incertidumbre, vivíamos en una zona de confort y este virus lo ha sacudido todo, por eso toca renovarse y mi trabajo gira en torno a la salud. Un alto porcentaje de mis alumnos tienen alguna patología y la actividad física es su medicina, así que, en pleno confinamiento, había que aportar alguna solución.

-¿Cómo se le ocurrió lo de dar clases por las redes?
-Surgió como una necesidad. Mis alumnos necesitaban clases de Pilates y empecé enviando videos con tablas de ejercicios por WhatsApp y también impartía por Zoom para quien quisiera clases en directo. Más adelante me sugirieron que podía subir mis clases a Youtube y así cree mi canal Nacho Somoza Pilates. Así pueden elegir la clase que prefieran según la dificultad o lo que les apetezca realizar.

-¿Qué dificultades ha tenido o gastos a la hora de soportar esta incursión en las redes?
-Si hubiera querido ninguno, pero al final cree mi pequeño estudio de grabación, para sentirme en mi espacio de trabajo y que no hubiera ninguna distracción. La mayor dificultad es el tiempo, grabar, editar y montar el vídeo me lleva horas y una de las cosas que me ha enseñado la pandemia es a abrazar la vida con mucha fuerza, sobre todo después de nacer mi hija hace 10 meses, ella es mi prioridad ahora.

-¿Piensa continuar con ese canal aunque se recupere la normalidad de las clases?
Por supuesto. Ha sido muy gratificante ver cómo he podido llegar con mis clases a cualquier parte del mundo. Al ser un servicio totalmente gratuito, cualquier persona con internet puede realizar una de mis clases, solo hace falta darle al botón de suscribirse.