"En Informática los estudiantes suelen encontrar un trabajo antes de terminar"

El máximo responsable de la Escuela de Ingenierías de la Universidad de León conoce a la perfección una Facultad en la que se licenció y dirige desde mayo del año 2011. Se siente orgulloso de la institución en su conjunto, desde profesores al resto de trabajadores, pasando por los cerca de 2.000 alumnos que hay matriculados. Y es que aunque reconoce que es una institución pequeña, cada año entran unos 360 estudiantes, mientras que entre un 70% y un 80% se gradúa en cada ejercicio.

– ¿Cuántos logran encontrar trabajo?
– La mayoría, yo creo que todos. De hecho hay titulaciones como en Informática en las que tenemos problemas para que los estudiantes terminen porque encuentran trabajo antes. Hay un montón de empresas que mientras los alumnos están en cuarto e incluso en tercero, vienen a hacer sus presentaciones y ya piden el currículum. Y no solo de León, viene de fuera.

– ¿Cómo salen formados?
– Lo importante de un ingeniero es poder adaptarse a los tiempos, es el espíritu de esta Escuela. Vamos a tener conocimientos de disciplinas muy variadas, pero no necesariamente en gran profundidad. Intentamos que nuestros ingenieros sean capaces de adaptarse a todos los cambios vertiginosos y que sean capaces de integrarse en entornos multidisciplinares. Es lo que demanda la mayoría de las empresas, también las internacionales, por eso fomentamos que al menos un año lo cursen en una universidad extranjera.

– ¿El objetivo es que se adapten a las empresas aunque no hayan trabajado en esa área?
– Evidentemente. Uno es ingeniero con el título, pero cuando entra en la empresa es ingeniero de esa empresa. Tiene que aprender esas disciplinas y eso lleva un tiempo de formación. Nuestro objetivo es que ese tiempo sea lo más corto posible por su capacidad y sus conocimientos.

Tenemos ingenieros que han salido de León que trabajan en Silicon Valley o son líderes de sus empresas– Las empresas tecnológicas dicen que necesitan en León cerca de un millar de trabajadores. ¿Pueden salir de la Universidad de León?
– Naturalmente, tenemos ingenieros que han salido de León que son directores de multinacionales extranjeras, trabajan en Silicon Valley en marcas conocidas, que son líderes en sus empresas en León, en España, en Europa y en el mundo entero. Complejo ninguno, aunque seamos una Escuela pequeña de una provincia en la que los leoneses no nos valoramos mucho.

– ¿Se colabora con la empresa para conocer sus necesidades y adaptarse?
– Tenemos mucha relación con las empresas, hay muchas de León que colaboran con nosotros para las prácticas de los alumnos, especialmente para los que no han terminado su formación. Y esas prácticas hay que mejorarlas, en unos casos son muy buenas y otras son mejorables. Estamos con las empresas para intentar ayudarlas, pero no es fácil, porque necesitamos una actividad para los alumnos en una época que no es fácil darla con buen soporte, pero nos apoyan mucho. Estamos trabajando en establecer algún sistema para poder tener retroalimentación con las empresas en todos los sectores.

– Las empresas dicen que lo que más necesitan son expertos en software.
– Las empresas de desarrollo utilizan un software dependiendo de las herramientas, pero son muchas y no todas son fáciles de aprender. No podemos hacer que haya un ingeniero especialista en la herramienta que necesita una empresa, aunque el periodo de cuatro meses para adaptarse se reduzca a dos días para conocer a la gente. Si quiere una oportunidad en otra empresa del sector o de otro, tiene que conocer más herramientas. A ello le añades las básicas de un ingeniero, que son las comunes para todos, que las necesitan para poder estudiar las demás y para cuando tengan un problema en el futuro, que es para lo que les pagan. En algún caso que las empresas han demandado formación concreta sí ha habido este tipo de cursos, que se ofertan a los estudiantes con precios muy baratos o gratuitos.

– ¿Se potencia y se logra que surjan empresas desde la Universidad?
– Es más difícil para nosotros porque no somos especialistas en crear empresas, pero a los que han querido hacerlo se les ha dado soporte en los primeros meses o incluso un año, teniendo la sede en la Escuela con un despacho para poder recibir clientes, mensajería y ese tipo de cosas. Pero no tenemos una incubadora de empresas explícita en la Escuela.

Me consta que ya se está transfiriendo conocimiento de ciberseguridad desde la Universidad hasta el Incibe– Otro campo especializado es el de la ciberseguridad. ¿Se trabaja en él? ¿Se colabora con el Incibe?
– Hay un máster en colaboración con el Incibe y me consta que trabajan muy estrechamente. Esto implica que se coloca a León en el mapa de la ciberseguridad a nivel mundial, y que a nosotros nos da la oportunidad de colaborar con otras universidades en aspectos de investigación. Hay estudiantes de doctorado que ya están realizando tesis al respecto. Aunque el Instituto es de reciente creación, como el campo es pujante hay mucha vocación para formar especialistas, que puedan ganar esos sueldos fabulosos que se anuncian. Espero que la empresa lo demande y lo reconozca como lo demanda, con ese entusiasmo. Nosotros estamos empezando a formar a estudiantes, el máster está implantado este año de carácter oficial, pero lleva varios años como título propio de la Universidad, y con alumnos que están trabajando en el sector y en otros, ya que los expertos en ciberseguridad se necesitan en cualquier empresa que tenga conexión a internet. Me consta que ya se está transfiriendo conocimiento desde la Universidad hasta el Incibe.