16/03/2016
 Actualizado a 14/09/2019
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Emprender está de moda y los emprendedores. Y yo celebro que no hayan necesitado de ningún barbarismo (del tipo que llama ‘runner’ a quien corre) para tomar impulso. Parece que si no es en inglés no mola tanto o que dicho en inglés el esfuerzo es menor. Somos así de tontos, tan tontos que estaremos más pendientes del centenario de Shakespeare que del de Cervantes y antes leeremos cualquiera de lastragedias o comedias del bardo anglosajón, que las andanzas de nuestro desventurado caballero andante. Aunque lo suyo, sería leer ambos.

Volvamos al emprendedor. No está bien visto, resulta sospechoso aquel con ambición para llevar a cabo, el que sale del surco, quien propone una manera nueva, diferente de hacer lo que siempre se hizo igual. Ahí está el refranero: más vale lo malo conocido… R. L. Stevenson nos dice que «buena parte de nuestra sabiduría cotidiana está concebida para personas mediocres, con objeto de disuadirlas de emprender proyectos ambiciosos y, en general, consolarlas por su mediocridad».

Me viene a la cabeza, al pensar en un emprendedor, Ícaro y cómo nuestro imaginario de siglos y milenios nos advierte desde niñoscontra el vicio de emprender. Ícaro asumió el sueño de todo hombre, quiso volar, volar era la única manera de escapar del laberinto, como emprender para muchos ha sido y es el único modo de salir de esta crisis. Ícaro, ayudado por su padre, Dédalo, como tantos ícaros de hoy ayudados por padres e incluso por abuelos, se atrevió a probar unas alas, algo que nunca nadie antes había hecho. Y voló y el vuelo fue tan alto, que se derritió la cera y cayó al mar y allí murió.

Este es el mensaje sibilino, encubierto, subliminal en muchos de los cuentos: no sean valientes, cuidado con volar, no osen cambiar, aunque sea necesario el cambio, es preferible mantenerlo todo como está. Miren lo que le ocurrió a Ícaro, que murió en el mar por querer volar. Pero yo hoy quiero, sin embargo, animar a quien le echa huevos pues, como dijo Kant: Dimidium facit qui coepit habet. Quien ha comenzado ya ha hecho la mitad. Emprender define la RAE como comenzar.

Y la semana que viene hablaremos de León o de la Urna de mi pueblo. Ya veremos.
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