Elecciones y representatividad

La convocatoria de elecciones autonómicas pone de manifiesto una falta de representatividad que perjudica a la Región Leonesa. La lógica dicta que, si existe cohabitación de dos regiones bajo la misma administración autonómica, la representación de ambas debe ser igualitaria. De esa manera se preservan sus intereses de forma equitativa. Así es en el parlamento vasco, donde cada provincia foral envía 25 representantes, aunque Álava no llegue a 330.000 habitantes o Vizcaya pase de los 1.130.000. Así los intereses de Álava están preservados.

Por tanto, la Comunidad Autónoma de León y de Castilla, constituida por dos regiones con estructuras económicas y sociales diferentes, e intereses diversos, necesita una representación paritaria de ambas. De lo contrario, ya se aprecia lo sucedido: los intereses leoneses son ignorados e incluso se atenta contra ellos.

Actualmente Soria tiene 5 procuradores, aunque es la quinta parte de la provincia de León, que cuenta con 13 representantes: 90.000 habitantes contra 455.000. Eso carece de proporcionalidad. Tampoco lo tiene que la Comarca del Bierzo, que cuenta con más habitantes que Soria (120.000 contra 90.000) y que fue reconocida institucionalmente por la Junta, carezca de un distrito electoral propio. Con la ley electoral, la Comarca del Bierzo tendría 6 procuradores. ¿Por qué se reconoce la singularidad del Bierzo para unas cosas y no para otras, como la configuración de los distritos electorales?

Incluso, si considerásemos la población como referencia a fin de representar a cada una de las dos regiones, la Región Leonesa tiene un peso del 40 % en la autonomía. Sin embargo, permanece infrarepresentada, ya que sus procuradores suman solo el37% del total: 30 sobre 81 totales.

En resumen, la Junta de León y Castilla no defiende los intereses de León e incluso atenta contra ellos, como en el bloqueo de la carretera entre León y Braganza, en el despliegue de las nuevas UCI en los hospitales de Ponferrada y de León, etc. La paridad en las Cortes podría denunciar y corregir esta postergación, pero la Región Leonesa permanece infrarrepresentada. La baja ponderación provoca que en los propios grupos políticos el debate de los problemas leoneses se diluya y no sea tenido en cuenta. La conclusión es palmaria: el declive leonés continuado sin respuesta, aunque el Estatuto de Autonomía obligue a la Junta a reaccionar. Recién publicados el padrón definitivo a enero de 2021, León perdió más de 4.000 habitantes en un año, Zamora más de 2.000 y Salamanca más de 3.500. La Región Leonesa, con la peor evolución de Europa, reclama medidas de Estado y representatividad propia.