El segundo dividendo digital llega con subvenciones para minimizar el gasto

El proceso de migración tiene que estar finalizado el 30 de junio del año que viene, pero si se cumple el plan del Gobierno, estará mucho antes de esa fecha

S.J.
28/07/2019
 Actualizado a 19/09/2019
La TDT cambiará antes del 30 de junio de 2020. | SAÚL ARÉN
La TDT cambiará antes del 30 de junio de 2020. | SAÚL ARÉN
Los cambios que se avecinan en la TDT tienen como objetivo abrir espacio para las redes de 5G, lo que supondrá toda una revolución en el acceso a internet. Hay que tener en cuenta que la banda de los 700 MHz que liberará algunos de los canales de televisión actuales tienen una mayor capacidad de penetración en interiores de edificios, de ahí que sean el espacio adecuado para la quinta generación de internet. Todo este proceso se denomina el segundo dividendo digital, puesto que es un ahorro de espectro radioeléctrico al pasar de la televisión analógica a la digital, algo que ya sucedió en 2015 y, por tanto, ahora se produce la segunda parte de esta modificación sustancial de la forma de ver los canales en casa, aunque obviamente sea un cambio menor en comparación con el primero, puesto que entonces se liberaron nuevas frecuencias y se multiplicaron las cadenas que se podían ver sin pagar por ello.

Eso sí, hay que tener en cuenta que si se disfruta de los canales TDT por medio de plataformas de pago, como pueden ser Movistar, Orange, Vodafone, no hace falta que se resintonicen, ya que estos cambios solo afectan a los que llegan desde antenas, no desde redes de internet.
El Gobierno ha aprobado ya ayudas de entre 100 y 600 euros para sufragar el gasto de adaptación de antenas
Para evitar que la reconversión de las antenas afectadas por el cambio de banda pueda suponer un problema para los propietarios de los bloques de viviendas, el Gobierno aprobó el pasado 21 de junio una serie de subvenciones directas por valor de 145 millones de euros que pretenden rebajar el coste. Esto se traduce en ayudas para minimizar los gastos, que pueden ser de entre 104,3 euros y 677,95 euros en función de la infraestructura previamente instalada.

Estas subvenciones se podrán reclamar a partir del 20 de septiembre y siempre desde las comunidades de vecinos, ya que son las que deben actualizar las antenas, porque hay que recordar que las viviendas unifamiliares no se verán afectadas por estas modificaciones, al igual que los edificios pequeños.

Y es que hay que tener en cuenta que aunque en León los cambios podrían afectar a unos 12.600 edificios, en el conjunto del país son 850.000 inmuebles y 21 millones de habitantes, es decir, prácticamente la mitad de la población tendrá que actualizar de alguna forma la antena de su vivienda.
En España el cambio afecta a 850.00 edificios y a más de 21 millones de personas, casi la mitad de la población
Todo para que la migración esté finalizada el 30 de junio del año que viene, aunque en buena parte del país el proceso de adaptación estará culminada mucho antes. No se sabe aún si en León ese plazo se acortará sensiblemente, aunque como la zona oeste comenzará antes la migración, el Bierzo y Laciana dispondrá de los canales migrados antes que la este, ya que hasta que no finalice la primera no se empezará con la segunda, según apunta el Gobierno.

Este cambio no es un capricho del Estado, sino que viene obligado por la Unión Europea. Así lo establece la Decisión (UE) 2017/899 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 17 de mayo de 2017, que tiene como objetivo garantizar un enfoque coordinado del uso de estas frecuencias en el territorio comunitario. El proceso se desarrollará en coordinación plena con los países vecinos, no sólo con los pertenecientes a la Unión Europea, sujetos al mismo proceso, también con Marruecos y Argelia.

Tal y como se establece desde la Secretaría de Estado de Avance Digital, son varios los agentes involucrados en este proceso, además de este organismo estatal y su Dirección General de Telecomunicaciones: radiodifusores públicos y privados; operadores de red que prestan a los radiodifusores el servicio de transporte y difusión de sus señales de televisión; comunidades de propietarios y usuarios que deberán adaptar sus instalaciones y equipos receptores; operadores de telecomunicaciones; instaladores; industria fabricante de equipos y sistemas de recepción y distribución de señales de TV; comunidades autónomas y entidades locales; instituciones como colegios de Ingenieros u organizaciones de consumidores.
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