El PSOE recupera Valderas tras un mandato del PP en minoría

Mucho se ha escrito en la prensa sobre el Ayuntamiento de Valderas en los últimos años a raíz de una deuda millonaria que han venido arrastrando hasta ahora y que los vecinos han padecido viendo como su pueblo no podía siquiera percibir subvenciones de la Diputación de León por no tener ni el 20% que ha de aportar el Consistorio para acometer obras de mejora en el municipio. El vacío en las arcas municipales y los problemas judiciales han hecho que la gobernabilidad del este Ayuntamiento del sur de León haya sido complicada y tener su bastón de mando se ha convertido en un reto. El alcalde Ignacio del Pozo, ya en funciones, informa hace poco más de una semana del estado en el que se encuentran las deudas, reducidas notablemente en los últimos años, y la situación jurídica del municipio, más liviana que en 2014. Ahora el relevo lo tomará Agustín Lobato, quien el 15 de junio se convertirá en el nuevo regidor de la localidad tras resultar su candidatura la más votada el pasado 26 de mayo en las elecciones municipales, una victoria que recupera el PSOE tras una legislatura en la que el PP ostentó el poder pero en minoría.

Durante la campaña electoral, la lista que encabezaba Agustín Lobato, la denominaron como ‘la candidatura progresista’, un equipo que llegaba auspiciado por las siglas socialistas a la política municipal valderense sin grandes proyectos pero «con muchas ganas de trabajar», conscientes de la situación que ha atraviesa el Consistorio a nivel económico y judicial pero también sabedores del potencial de un municipio como Valderas. Agustín Lobato será el nuevo alcalde de la localidad valderense y lo será con un equipo de gobierno que obtuvo una mayoría absoluta a la que llegaron con el 49,86% de los votos emitidos el 26 de mayo en Valderas (549) y tras cuatro años en los que habían estado representados en la corporación municipal por tres concejales. La remontada de los socialistas en los comicios ha relegado al Partido Popular a la oposición con tres concejales. A estos llegaron con el 33,33% de los apoyos (367 votos). La candidatura del PP, encabezada por Rosa Moreno, no llegó a los resultados de las elecciones de 2015 donde obtuvieron una representación de 4 concejales y que, aún en minoría, consiguieron gobernar con la abstención de los grupos de la oposición entonces, PSOE y Vox.

Esta vez Vox ha salido del panorama municipal de Valderas a pesar de que esta fue una de las primeras localidades en las que estuvo presente a nivel nacional. La formación de extrema derecha no contaba más que con un puñado de ediles en toda España y dos de ellos los tenía en Valderas: Isidoro Fernández y Eloy Rubio. El primero optó por presentarse como cabeza de lista al amparo de Ciudadanos y Eloy Rubio, quien fuese alcalde de Valderas por el PP entre 2007 y 2011, desaparece esta vez de la política municipal del sur de León.

Fernández seguirá teniendo un asiento en la corporación municipal ya que así lo quiso el 26 de mayo un 15,53% (171 votos) de los votantes de Valderas, un porcentaje mucho menor que el que recibió en 2015 cuando encabezaba la lista de Vox con la que obtuvo un 23,93% del apoyo de los valderenses (258 votos).

De este modo la corporación municipal de Valderas quedará conformada por 5 concejales del PSOE con Agustín Lobato en cabeza, con 3 del PP y con uno de Ciudadanos. Lobato planteaba ya en programa electoral el llevar a cabo una auditoria «para conocer el estado real de las cuentas y a partir de ahí saber con qué recursos contamos para poner en marcha las propuestas». Entre esos proyectos que les gustaría acometer en Valderas están promover la implantación de un centro de día así como implementar un servicio de cátering a domicilio para los más mayores, adecentar el polideportivo y las piscinas, trabajar para ofrecer unas fiestas y ferias «como Valderas merece» y retomar la negociación con los pueblos de la ribera del Cea para modernizar los regadíos y al mismo tiempo paralizar la demolición del azud por parte de la CHD. Los socialistas tienen en mente adecentar también la zona del molino de la localidad y trabajar conjuntamente con las asociaciones locales para llevar sus proyectos a buen puerto. El apoyo ya se lo han dado los valderenses, ahora solo queda ponerse manos a la obra.