El pantalán es un refugio firme y seguro desplegado sobre el abismo: aguarda a los navegantes permitiendo a tus pies acercarse un poco más al horizonte.
Tiembla a lo lejos el mar, absorbido por el ojo que mira, como si fuese una inmensa balsa sumergida en otro mar invisible. Podría mantenerse así, toda la eternidad, contemplando los cambios sustanciales de la luz reflejada en las aguas. Con la pupila empapada de misterios salobres, tocada por la mágica cadencia de las olas, en este verano agazapado en la nostalgia de aquellos días que fueron felices y transparentes.
Fotografía Julia G. Liébana.
Texto Nuria Viuda
El pantalán
Julia G. Liébana llega a las contraportadas de La Nueva Crónica de este verano para formar parte del Retablo de artistas leoneses
25/07/2019
Actualizado a
19/09/2019

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