El Museo de Cacabelos viaja a la prehistoria con Cavernarios

La muestra habla de la evolución humana con una recreación sorprendente de una cueva rupestre que está abierta al público hasta el 15 de abril

Mar Iglesias
16/02/2018
 Actualizado a 18/09/2019
La parte clave de la muestra es la dedicada a la evolución humana con el cráneo conocido como Miguelón. |  MARCA
La parte clave de la muestra es la dedicada a la evolución humana con el cráneo conocido como Miguelón. | MARCA
El Museo Arqueológico de Cacabelos, Marca, abre las puertas a una nueva propuesta expositiva que bajo el nombre de ‘Cavernarios’ pretende subirse a un viaje para recorrer la prehistoria de una forma accesible y sensitiva. Para ello, el Marca se viste de pasado y nos introduce en una gran cueva rupestre, donde los sentidos cobran toda la importancia. Allí, los sonidos del agua, el olor floral…suponen llevar a la piel la historia del ser humano, incluso la fauna acompaña. La recreación de mamuts, de los tigres dientes de sable o el águila o el lobo son la compañía prehistórica de la muestra.

Reconoce la organización, liderada por la directora del Museo, Silvia Blanco, que el montaje es arriesgado «ya que se ha recreado no solo una cueva rupestre, sino también un bosque de la prehistoria, en donde no falta detalle», con la complicación que ha tenido realizarlo fielmente.

En la primera planta del Marca la exposición sigue con la parte dedicada a las piezas muebles, con una selección especial en la que el visitante puede descubrir cómo es la Venus de Willendorf , o ver el bisonte de Madeleine, una pieza elaborada en asta de reno o incluso una bramadera de la Roche, que servía para comunicarse y también como instrumento musical. A su lado aparecen piezas de caza, como las puntas de lanza o de flecha realizadas en silex, las hachas de mano,… o herramientas como los conocidos bifaces. Dentro de la muestra aparece una sala dedicada expresamente a la evolución humana, con réplicas de los cráneos de los Neandertales, Heidelbergensis, Australopithecus y Homo Sapiens entre las que destacan la pieza estrella el cráneo nº5 más conocido como Miguelón, encontrado en las excavaciones de Atapuerca.

«Con esta apuesta expositiva hemos querido darle una vuelta de tuerca a la arqueología haciéndola más accesible y abierta a todo el público. Buscamos un concepto diferente, cercano de la prehistoria y sinceramente, creo que lo hemos conseguido», dice Blanco. Se trata de una exposición «muy sensorial desde que el visitante inicia el recorrido a la exposición a través de una recreación veraz de la flora y la fauna. El trabajo de montaje esta vez ha sido durísimo, pero el resultado es espectacular.Ahora solo falta que la juzgue el público». Las dos plantas del museo cacabelense están destinados a esta propuesta, que cuenta con colaboraciones importantes con el Museo de Ciencias Naturales gestionado por la AsociaciónBurval y el Ayuntamiento de Villafranca del Bierzo, Julio Lamas Piel además de coleccionistas privados. La muestra estará abierta hasta el próximo 15 de abril.
Lo más leído