El maragato que creó conservas Calvo

Luis Calvo Sanz, maragato de Santa Marina de Somoza, montó ‘el imperio’ Calvo, el del famoso anuncio, pero también fue pionero en otros muchos aspectos, como la lata redonda

Fulgencio Fernández
28/11/2021
 Actualizado a 28/11/2021
conservas-calvo-leon-28112021.jpg
conservas-calvo-leon-28112021.jpg
En los años 80 se convirtió enun fenómeno social un anuncio de televisión, protagonizado por dos conocidos actores de la época —Juanjo Menéndez y Jesús Puente— con una característica común, además de la fama, que eran calvos.

Y en base a esa coincidencia entre la condición de calvos de los actores y el apellido de un singular empresario nació el primer anuncio de lo que se ha considerado el humor absurdo, que tantos éxitos ha cosechado desde entonces pero muy arriesgado entonces. Era aquel remate del anunció que se convirtió en un latiguillo: "Atún Calvo, claro". En cualquier lugar que dijeras "Calvo", alguien remataba "claro" pues el anunció llegó a través de la televisión al último hogar del país. El impacto de aquel anuncio se repitió años más tarde cuando Conservas Calvo se coló nuevamente en todas las casas a través de uno de los programas más seguidos de la historia de la televisión, el ‘Un, dos, tres’ del maestro Chicho Ibáñez Serrador.

La empresa conservera del leonés Calvo «también fue la comercializadora del primer pack de tres latas juntas de atún de Europa, y en el novedoso formato de lata redonda»Curiosamente, y felizmente, detrás de aquel anuncio había una gran empresa conservera, Conservas Calvo, y detrás de aquel ‘imperio’ nacido en la localidad gallega de Carballo había un leonés, un maragato de Santa Marina de Somoza —Luis Calvo Sanz— que antes de apostar por esta arriesgada campaña de publicidad ya había dado muestras de ser un empresario diferente e imaginativo pues, por ejemplo, fue el inventor (en el año 1956) de su propio sistema para enlatar atún en base a una pieza de tostar café y el casco de un proyectil. Así lo describen desde la propia empresa: "Se trataba de un cilindro de hierro provisto de bisagra para abrirse en dos mitades y ser rellenado por lomos de atún que posteriormente eran cortados en porciones similares. Con una capacidad de producción de 36 latas por minuto, la nueva empacadora era mucho más rápida y eficiente que cualquier sistema existente en ese momento, y permitía, además, ofrecer una mejor presentación del producto final, más uniforme en peso, contenido y aspecto". Parece que, además de aquel invento, el leonés dejó en el ADN de la empresa el gusto por la innovación y la investigación en su campo. Así, años más tarde sería Calvo quien lanzó al mercado "el primer pack de tres latas de atún de Europa en formato de lata redonda". Decir que en la actualidad el 90% de las latas de conserva se comercializan en formato redondo.

El maragato Luis Calvo Sanz


Y detrás de esta gran empresa, que sigue siendo líder en el sector, está la figura del maragato Luis Calvo Sanz, de Santa Marina de Somoza. El profesor gallego y cronista de Carballo Xan Fraga es un gran conocedor de la historia del leonés y la empresa por él fundada. Ha investigado y escrito de ella en trabajos colectivos como ‘La conserva en España’ o sus libros dedicados a ‘Crónicas de Carballo’, buena parte de la información existente sobre el grupo es fruto de sus trabajos.

Señala Xan Fraga que se trata de una figura realmente fascinante y desvela la andadura del fundador. "Luis nació el 19 de julio de 1897 en Santa Marina de Somoza, el pueblo que tanto añoraba. Y en 1908 murió su padre con solo 52 años, un hombre del que heredó su espíritu emprendedor pues éste había sido emigrante en Cuba, también estuvo en Madrid y, finalmente, en Carballo, donde acudió buscando un clima propicio contra el asma que padecía".

Ya viviendo en Carballo inicia Luis Calvo Sanz su propia aventura empresarial y política pues fue un personaje comprometido socialmente. "Montóprimero unalmacén de alubias con el nombre de Hijo de J. Calvo; y en 1934 se casó con María Dolores Pumpido", de una conocida familia de Carballo, algo que, como se verá, tuvo importancia en posteriores avatares de Luis Calvo.

El leonés se implicó activamente en la política local con la llegada de la II República, en 1931. Explica Xan Fraga que el leonés "fue consejero primero y síndico después por el partido de Manuel Azaña, Izquierda Republicana, por ello, la llegada de la dictadura supuso para él la represión. Fue procesado junto a otros compañeros en la causa 357/1937. Y fue entonces cuando se salvó de males mayores gracias a las reiteradas gestiones de su mujer, emparentada con la familia de ‘los Pumpidos’, alguno de ellos (como Luciano Conde Pumpido) alto cargo del franquismo. Fue absuelto de los cargos que le imputaban pero sus empresas permanecieron en la lista negra", lo que le confiere aún más mérito a la gestión de sus Conservas Calvo, pues sí sufrió contratiempos a la hora de montar con anterioridad fábricas de conservas de carne o de fabada que no pudo llevarlas a buen puerto. Algo que sí logró con su siguiente empeño, las conservas de sardinas... acababa de nacer Conservas Calvo, claro.

Era el año 1941 "cuando comenzó a funcionar la que fue la primera fábrica de Calvo en Carballo, una instalación modesta en la que trabajaban 25 personas y en la que el empacado se realizaba a mano con la materia prima que llegaba de los puertos gallegos de la Costa da Morte. Sus hijos, que con el tiempo se harían cargo de la conservera,cursaban estudios pero también trabajaban en Calvo participando, por ejemplo, en ladescarga de camiones mientras su padre se las ingeniaba para la compra del pescado en los diferentes puertos".

Ese ingenio no lo ponía solamente el servicio de las compras, también del día de la fábrica y así como en 1956 inventó y patentó la máquina de la que ya hemos hablado. "No solo fue un gran invento para la propia fábrica, también vendió numerosas máquinas para otras fábricas".

Luis Calvo Sanz participó en la política local en Carballo en la IIRepública, en las filas de la Izquierda Republicana de Azaña, lo que le costó sufrir represión con la llegada del franquismoEl siguiente paso en la faceta de hombre adelantado a su tiempo llegó tan solo unos años más tarde, y tiene mucho que ver con aquel anuncio que popularizó la ‘modalidad’ de atún que Luis Calvo iba a comercializar, el atún claro. Así lo cuenta Iván Fernández Amil en un trabajo sobre los ‘inventos’ del creador de Calvo: "A mediados de los 60 llegó la segunda gran innovación de Calvo en el sector conservero: la introducción del atún yellowfinn (aleta amarilla) que José Luis Calvo descubrió en uno de sus viajes por el mundo. Había nacido el Atún Claro, el nuevo referente al que todos imitaron".

El citado José Luis Calvo es uno de los hijos del leonés y quien le sucedió en la gestión de la empresa pues en los años 70 el maragato fue cediendo la gestión de Conservas Calvo a sus hijos. La llegada de savia nueva supuso la construcción de unas nuevas instalaciones para la empresa y también ellos aportaron ‘otro invento’ que revolucionó el mercado y mantuvo ese gen creativo que había sido un sello de identidad impuesto por Luis Calvo. "Pusieron en el mercado el nuevo formato que hizo historia: el pack de 3 latas". Su éxito es tan evidente que ha sido copiado por conserveras de todo el planeta.

Otro de sus hijos, Manuel, se convirtió en armador de su propia flota de atuneros, teniendo así el control de todo el proceso, del mar al pack de latas.

Éxito que aquel maragato pudo disfrutar pues no falleció hasta dos años después, concretamente en 1980, a los 83 años de edad.
Lo más leído