Casi cinco millones de euros figuran para el vial, si bien la mayor parte son para el tramo gallego entre A Veiga y Barco de Valdeorras, que según ha mantenido el ministerio de Fomento en los últimos meses será el que dará el pistoletazo de salida a la construcción de una autovía por la que se ha luchado durante décadas.
Esta vez el Gobierno se ha puesto manos a la obra y ha incluido importantes partidas en los presupuestos con la intención de que las primeras obras se puedan licitar antes de que termine el año.
Pero para ello, primero deben salir adelante unos presupuestos antes de que acabe el curso político, lo que al igual que sucede en el Ayuntamiento de Ponferrada, obliga al equipo de Gobierno a buscar apoyos en un escenario político totalmente fragmentado.
Así, la llave para que las cuentas salgan adelante y con ellas, la puesta en marcha definitiva de la A-76 está en manos del Partido Nacionalista Vasco (PNV). Para obtener los 176 votos necesarios para aprobar los Presupuestos de 2018, Rajoy necesitaría sumar a los 134 escaños del PP los de Unión por el Pueblo Navarro (2), Foro Asturias (1), Coalición Canaria (1), Nueva Canarias (1) y los cinco de los vascos, cuya presión ya ha conseguido una subida de las pensiones y el retraso de la entrada en vigor del factor de sostenibilidad que ha provocado las críticas y la movilización social de los sindicatos.
Si finalmente se produce el pacto, sería el tramo entre A Veiga y Barco de Valdeorras, al que se destinan tres millones de euros, el primero en salir a licitación. De hecho, para el tramo berciano entre Villamartín de la Abadía, perteneciente a Carracedelo, y Requejo, en Sobrado, apenas se ha dirigido medio millón de euros.
El tramo salió a información pública el pasado mes de marzo y contempla un recorrido de 6,2 kilómetros que ya prevé accesos a la plataforma logística que se quiere impulsar desde la comarca. Así, pese a que además será en Villamartín donde se ubique el enlace de conexión con la A-6, es en el tramo gallego donde comenzarán las obras.
Autovía más adelantada
El presidente de la Comisión de Fomento, Celso Delgado, mantuvo la semana pasada una reunión con los empresarios de Valdeorras en el que ratificó el compromiso y la apuesta decidida del Gobierno por la A-76.
Las inversiones en infraestructuras son la ‘joya’ de la corona de las presupuestos y los que centran la mayor parte del debate y las reivindicaciones, tal y como ha ocurrido recientemente en la comarca con el AVE, y son cientos las peticiones y proyectos que se quedan en el limbo, algo que según el propio Delgado, no va a ocurrir con la autovía que unirá Ourense y el Bierzo y que según asegura, es la que «está más adelantada desde el punto de vista administrativo».