El esperado regreso del baloncesto

24/06/2022
 Actualizado a 24/06/2022
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Hay una generación entera que no ha vivido el esplendor del baloncesto en León. Otra a los que nos pilló demasiado jóvenes el inicio de la historia del Elosúa, pero todavía pudimos disfrutar de aquella inolvidable Copa del Rey en León, de los últimos años de ACB y del segundo ascenso con el reducido paso posterior por la máxima categoría.

Pero los números y las imágenes no engañan. León fue una ciudad de baloncesto, con un público con perfil de gente y edades muy diverso dotando de un excelente aspecto al Palacio, y 1.500 o 2.000 personas manteniéndose fieles hasta el final en los momentos ya menos brillantes de los últimos años en Leb.

Sin embargo, Baloncesto León murió, o más bien le dejaron morir, aunque no es cuestión ahora de entrar en ese debate. La ciudad se quedó sin su club por las deudas y la transición hacia otro equipo que tapara su hueco fue haciéndose demasiado larga hasta el punto de darse por perdida.

Lo intentó el Basket León, con más ganas que resultados pese a tener detrás la cantera del Colegio Leonés que siguió brillando en las categorías inferiores. También Agustinos, que llegó a estar en Leb Plata pero sin enganchar a la gente y endeudándose en el camino. Pero pese al trabajo de sus gentes, que no se puede negar, estaba claro que por separado sus caminos tenían un techo ya fijado y era muy bajo.

Por eso, salga bien o mal, el nuevo proyecto lanzado por la Cultural es un soplo de aire fresco. La sensación de que, por fin, hay esperanza, de que se puede volver a soñar con tener baloncesto de élite en León, aunque luego llegar a conseguirlo sea otra cosa muy diferente.

La gente está ilusionada. Conseguir unir en la misma mesa para lanzarlo a las dos facciones que existían hasta ahora, cuando parecían irreconciliables, es el primer paso para evitar ya de salida divisiones y que nadie se quede atrás.

No tiene muchas alegrías León como para renunciar a todas las que le dio el baloncesto. La Cultural y en particular Felipe Llamazares han dado sólo un paso, pero es el primero y más importante, y lo han hecho asegurándose hacerlo sobre terreno sólido y sin ningún charco ni agujero con el que tropezarse. Y esa es la mejor manera de iniciar un proyecto así.
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