El presidente de la CHD, Juan Ignacio Diego Ruiz, presentó el informa anual del Plan Hidrológico del año 2016/2017, en el que figura como hito destacado la declaración de sequía prolongada en la cuenca del Duero al amparo del Real Decreto 684/217, de 30 de junio, que faculta al organismo para adoptar medidas excepcionales para una mejor gestión de los recursos hídricos.
Recordó que las principales medidas de racionalización del gasto se centraron, por un lado, en los usos agrícolas, en los que el volumen de agua disponible por hectárea en varios sistemas como Órbigo, Carrión y Pisuerga- Bajo Duero resultó menor que en un año normal, circunstancia de la que fueron “informadas puntualmente” las comunidades de regantes.
Por otro lado, fue necesario establecer los caudales ecológicos en diferentes tramos fluviales, como contempla el Plan Hidrológico del Duero en este tipo de situaciones, con el fin de preservar al máximo las reservas de los embalses al final de la campaña de riego y así atender la demanda del consumo humano.
El propio informe recoge que, a pesar de la incidencia de la sequía, el estado general de las masas de agua -tanto superficiales como subterráneas- se mantiene en niveles de calidad muy similares a los de años anteriores. De hecho, precisa, “apenas” se han producido incumplimientos de los regímenes de caudales ecológicos.
Caudales aportados a Portugal
Respecto a los caudales entregados a la parte portuguesa de la demarcación, fue posible respetar el objetivo de aportar 3.300 hectómetros cúbicos durante el año. Es una cifra medida en el embalse de Saucelle aunque el cálculo en la presa de Miranda -punto intermedio en el tramo transfronterizo- estuvo un 11 por ciento por debajo de lo establecido.
El presidente explicó que próximamente saldrán a información pública los Planes de Sequía Prolongada y Escasez Coyuntural de Agua de todas las cuencas. También hizo referencia al proceso de diálogo en marcha para suscribir, con el máximo consenso, el Pacto Nacional por el Agua.