El Bierzo, entre 'plagios', tópicos futboleros y colas en los colegios

La llamada a la participación fue el ‘leit motiv’ de los políticos de la comarca al acudir a las urnas, una “fiesta de la democracia” que esta vez sí fue un éxito de convocatoria

Alejandro Cardenal
28/04/2019
 Actualizado a 19/09/2019
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Llega el ‘día D’ y a los políticos, tras varias semanas haciendo ‘bolos’  por doquier en garitos que no volverán a pisar hasta dentro de cuatro años –o dentro de unos meses, que tampoco sería la primera vez– llegan a las urnas con la gasolina justa y el piloto automático.

No es un día para florituras no vaya a ser que luego el recuento nocturno suponga una bofetada retroactiva, así que sin importar el partido, el mensaje es el mismo: ciudadanos, a votar, que esto es la fiesta de la democracia.

No hay aparición pública que se precie sin llamada a la participación, aunque a la vista de las colas que desde la primera hora de la mañana había en los colegios electorales de la capital berciana, la movilización tampoco era necesaria.

Los que intentaron ir más allá, siguiendo con el símil musical con el que empezaba esta crónica, desafinaron un poco. El número 2 de la lista de Unidas Podemos por la provincia de León al Senado, Javier Arias, rozó el ‘plagio’ pidiendo a los españoles “elegir los derechos y no las derechas”, un mensaje calcado al del portavoz socialista en el Senado, Ander Gil, hace apenas un par de días.

Por su parte, Alfonso Arias, número 3 de los populares al Senado por León, cayó en los tópicos más futboleros. No fue un “fútbol es fútbol”, pero casi. “Animo a todos a llenar las urnas con votos” y“el resultado de hoy será el que nos gobernará cuatro años” ratifican que la clase política llega ya a la cita con la lengua fuera.

Sin obstáculos para la democracia


En lo que concierne a los votantes, en el IES Virgen de la Encina, uno de los epicentros electorales de la comarca, los pasillos estuvieron a rebosar durante toda la mañana. También ayudó que, por fin, el centro educativo haya eliminado las barreras arquitectónicas que durante años convertían los comicios en una odisea para las personas con movilidad reducida.

Los ochos escalones que se interponen entre la calle y el interior del instituto obligaban a tener que llevar en ‘volandas’ a ancianos o sillas de ruedas, un problema que esta vez no hubo gracias a la nueva rampa que facilitó el acceso. En el Bierzo ya no hay obstáculos para la democracia.
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