El arte de la imperfección se instala en el Camarote

El artista leonés Francisco Flecha expone durante este mes de febrero en el Camarote Madrid cinco piezas que forman parte de la serie de cerámicas de Rakú, «una técnica procedente de la China anterior a los tiempos de Cristo, que posteriormente fue copiada por los japoneses y va ligada a la filosofía Zen, al ‘Wabi-sabi’ y a la ceremonia del té», sostiene Flecha, quien a la hora de ponerla en práctica hace en primer lugar el diseño de la pieza y la somete a una temperatura de cocción de mil grados. Tras incorporar el esmalte vuelve a introducirla en el horno y a esa elevada temperatura la extrae mediante unas pinzas y la introduce en un cubo con serrín o con agua. «De esta manera consigues el efecto de que no hay uniformidad y por eso cada pieza es única», asegura el artista, que destaca el hecho de que los materiales con los que ha trabajado están especialmente vinculados al ser humano, como la madera o el barro, que nos indica que «no debemos olvidar de dónde venimos y en mi caso lo transfiero a lo contemporáneo».

Francisco Flecha también se dedica a reparar y afinar acordeones, además de haber impartido cursos de cerámica de Rakú durante cuatro años a los alumnos del Centro de Idiomas de la Universidad de León, una modalidad en la que se reconoce plenamente como artista y con la que espera poder seguir ganando visibilidad a través de futuras exposiciones. La del Camarote Madrid es un primer paso que se materializa en cinco sorprendentes piezas en las que prevalecen la geometría y el volumen.