Diéguez refuerza el centro de la defensa de la Ponferradina

Con la marcha de Copete al Mallorca la Ponferradina necesitaba reforzar un centro de la defensa donde Pascanu y Amo apuntan a ser las principales referencias. Y el conjunto berciano ya ha encontrado el jugador deseado, aprovechando su descenso a Primera RFEF para conseguir su traspaso y devolverle al fútbol profesional en el que lleva ya de forma ininterrumpida desde 2017.

Se trata del central Adrián Diéguez, que procede del Fuenlabrada con el que el año pasado disputó 35 partidos de liga, 32 de ellos como titular, si bien no pudo evitar que descendiera de categoría un conjunto madrileño en donde cumplía su segunda temporada, siendo también importante en la anterior en la que finalizaron en mitad de la tabla, pues disputó en ella 34 partidos saliendo de inicio en 28.

Era su tercera temporada consecutiva en Segunda División pues anteriormente había estado en otro equipo madrileño, el Alcorcón, donde al igual que luego en Fuenlabrada había tenido un papel principal, con 32 partidos disputados en liga, 31 de ellos de titular.

Es un central contundente, con 14 amarillas de media en las tres últimas temporadas, y con experiencia en Primera con Alavés y Huesca Un total de 2 goles con el Fuenlabrada y uno con el Alcorcón hizo Diéguez, un central contundente y con un alto número de amarillas recibidas, pues cumplió dos ciclos de sanción en dos de las temporadas y tres en una, recibiendo 14, 16 y 11 respectivamente, y estando cerca de recibir una de media cada dos encuentros.

El nuevo jugador berciano tiene también experiencia en Primera División, donde debutó con sólo 21 años jugando seis partidos de inicio con un Alavés en el que no tuvo protagonismo la temporada siguiente, en la que se iría cedido al Huesca que también estaba en la máxima categoría y donde tras llegar en Navidad disputó ocho partidos de titular.

Otra etapa con el Alcorcón en Segunda, muy joven y sin apenas protagonismo, y media campaña en Segunda B con el Fuenlabrada al que años después regresaría completan la experiencia de un jugador de 26 años y 1,80 metros de altura que se formó en las canteras del Carabanchel y el Getafe.