A lo largo de los años se ha hablado de la senda del Cares aludiendo solamente al desfiladero, pero el Cares en León tiene un recorrido bastante largo que se podría realizar en tres etapas: la primera desde el alto de Panderruedas hasta Posada de Valdeón, siguiendo la antigua carretera que solamente es pista y muy fácil de recorrer. La segunda es la que se propone entre Posada y Caín, que si bien hay carretera y se puede realizar en coche, sus caminos son muy interesantes, aunque a veces haya que compaginarlos con el asfalto.
El valle de Valdeón está integrado en el Parque Nacional de los Picos de Europa y en el Regional del mismo nombre y la Junta de Castilla y León ha adecuado recientemente el camino. Sin embargo hay zonas que por su especial orografía deben compartir espacio con la carretera y se está intentando buscar un camino alternativo, cosa que resulta complicada, pero no imposible si se hacen unas pasarelas o puentes en la pared. Sólo costaría algo de dinero que beneficiaría más el turismo de la zona.
Las informaciones del Parque citan esta ruta como una sola llamada PR PNPE 3 y va desde Posada a Poncebos, lo que implicaría tener una buena cobertura de transporte si se desea volver al lugar de inicio, aunque la propuesta que aquí se realiza de dos etapas resulta más apropiada a la hora de la logística, pues siempre se puede volver en un taxi desde Caín.
Desarrollo de la ruta
Parte la ruta de la localidad de Posada bajando por el pueblo abajo para cruzar el puente sobre el Cares y seguir por un camino paralelo al río hasta llegar a un edificio que antaño fue fábrica de luz, llamado el Pombero, donde desemboca el arroyo del mismo nombre. Por ese camino se continúa dejando a la derecha la localidad de los Llanos hasta llegar a la altura del mini embalse, donde se une el camino que viene de los Llanos y se dirige al cementerio. Continúa el camino junto al embalse y más alla de la presa manteniendo su altura mientras que el río se despeña al fondo del barranco. Se trata del camino del Bustio, alejado de la carretera y que al final desciende por unas praderas y la cruza una vez pasada la localidad de Cordiñanes. Sigue el camino hasta llegar al mirador del Tombo desde donde hay una excelente vista a los macizos central y occidental de los Picos de Europa. Desde ahí se sigue el camino que baja y en un punto cruza la carretera descendiendo entre los prados por una fuerte pendiente hasta llegar al inicio de la Vía Ferrata de Valdeón, donde se ve el puente de salida. Se aconseja no cruzarlo sin las precauciones mínimas (autorización, casco, arnés y disipador), pues aparte de estar prohibido puede resultar muy peligroso.
El camino prosigue hasta que en un punto llega a la carretera, a la altura de la Fuente de la Teja Oscura, donde se marcha un corto tramo al lado del asfalto, para internarse poco después en el bosque. Cerca del Chorco de los Lobos el camino vuelve a ser compartido con la carretera y para ello han puesto unas señales luminosas y una silueta de persona pintada sobre el suelo, lo que indica que la carretera se comparte con los peatones, se trata de un tramo muy pequeño y en este punto si lo desea, el caminante se puede acercar al puesto de información donde muestran la ingeniosa trampa para cazar lobos, llamada Chorco.Continúa el camino que salía antes del Chorco hacia el río, que se cruza, vadeando poco después el arroyo Mermejo que se pasa bien si hay poco agua, pero para las crecidas han colocado un puente de madera con el fin de cruzarlo mejor, llegando a Sesanes y poco después a la ermita de Corona, donde dicen que coronaron al rey Pelayo y se celebra una romería todos los días 8 de septiembre.
La ruta sigue por un camino cercano a las praderas y se introduce después en el bosque hasta que en un momento determinado sube para seguir una senda que evite pasar por las propiedades de la zona de Peguera, bajando después hasta Santiján para cruzar el río por el puente del mismo nombre y salir a la carretera, por la que se sigue durante el largo trayecto de una estrecha garganta, donde hay que tener cuidado con el tráfico que debiera ser lento debido a la estrechez y las condiciones de la carretera, pero a veces eso no sucede.
Pasado el puente y poco después el vertical arroyo que desciende de las cumbres, el espacio se abre y a la derecha sube un camino señalizado hacia la collada del Pando y más tarde pasa por la fuente de la Jarda, una surgencia que todo el año está seca, menos en la primavera que fluye una gran masa de agua. El camino desciende hacia Caín, justo al lado del puente de entrada, se cruza y se adentra uno en la localidad, donde finaliza la ruta.