Denuncian que Forestalia pone en peligro el sector agrario

La plataforma ecologista Bierzo Aire Limpio ha presentado alegaciones contra el proyecto que el grupo Forestalia llevará a cabo en Cubillos del Sil: una planta de producción eléctrica a partir de biomasa que según las primeras estimaciones, podría generar más de 300 empleos en la comarca, ya que consideran que supondrá «un aumento de la contaminación atmosférica existente en el Bierzo» que afectará, especialmente, al sector agroalimentario, uno de los grandes motores económicos de la comarca. «La industria agroalimentaria es a día de hoy uno de los pilares socioeconómicos de la Comarca y no solo en puestos de trabajo, pues está reconocida a través de un número significativo de marcas de garantía, e Indicaciones Geográficas Protegidas y Denominaciones de Origen. Este proyecto aumentará la carga contaminante ya existente en la Comarca por lo que se está poniendo en peligro el sector agroalimentario y sus puestos de trabajo», denuncian.

Y es que según el colectivo, el Estudio de Impacto Ambiental obvia que en los últimos años se han superado los márgenes recomendados. «No se evalúa el impacto sobre la calidad del aire que debe ser detallado, modificando su valoración al máximo o crítico dada la situación de esta Comarca», explican los ecologistas, que lamentan la falta de «garantías» sobre el origen de la biomasa. «Se contempla que el 30% del consumo dematerias primas sea de paja de cereal y el 70% restante del consumo de biomasa está basado en pino, chopo o roble. Entendemos que estos datos son ficticios e irreales sin que en la zona exista tanta biomasa para abastecer semejante consumo», apuntan.

También destacan el «gran riesgo» de contaminación del suelo y de los acuíferos cercanos al polígano del Bayo, asegurando que «cualquier contaminación de las aguas subetrráneas afectaría directamente por su escorrentía a pozos, charcas y cultivos».

El proyecto, que se lleva a cabo por la empresa Forestalia con la colaboración de la Junta, a través de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) y del Ente Regional de la Energía (Eren), contará con una inversión inicial que rondará los ochenta millones de euros.