Con este mecanismo, prosiguió la consejera, se “garantizaría la seguridad de suministro”. Si Endesa, filial de Enel y “con poca capacidad de decisión”, apuesta por terminar con Compostilla, “seguramente otra empresa podría continuar con la actividad, porque es rentable”. Ello podría llevar a un cambio de propietarios o a una subasta a bajos precios, “incluso a un euro”, dijo Del Olmo, quien añadió que el “problema” es que a Enel, con participación del Gobierno italiano, no le interesa la política energética española.
El ministro del ramo, Álvaro Nadal, se refirió la semana pasada en el Senado al futuro de las centrales térmicas de Compostilla (León) y Teruel, sobre las que aseguró que hará todo lo posible para evitar su cierre. Al respecto, Del Olmo compartió la continuidad del carbón autóctono, así como de la central térmica, si bien explicó que es competencia del Gobierno central al superar los 50 megavatios (la infraestructura berciana cuenta con cerca de 1.000).
La consejera recibió hoy a los miembros del Comité de Empresa de la central, una de las más importantes de España en su segmento, y destacó la “seguridad de suministro” que ha proporcionado en épocas en las que la meteorología ha sido adversa para las energías renovables y no se ha podido importar electricidad de Francia. “Y todo ello, a precios razonables”, destacó Del Olmo. Compostilla produjo energía a 50 euros el megavatio hora, por ejemplo, en los meses de diciembre y enero pasados, más barato que los 90 euros de otro tipo de fuentes. En un momento en el que las térmicas pesaron el 16 por ciento del mix energético nacional ante la ausencia de lluvias.
En la reunión con el Comité de Empresa también estaba presente el director general de Energía y Minas, Ricardo González Mantero, quien habló de la adaptación de las instalaciones de las centrales térmicas a Directiva Europea de emisiones industriales para poder seguir operando más allá de 2020. En este sentido, señaló que ya han acometido la primera fase, la de desulfuración, los tres grupos de Compostilla, el 2 de La Robla y el 2 de Guardo, con lo que su vida útil estará garantizada hasta 2023. Aún no lo han hecho los grupos 1 de La Robla, 1 de Guardo y la central de Anllares, en Páramo de Sil. Para la segunda fase, la de desnitrificación, “existen avances” en el grupo 2 de La Robla. Para esta etapa cuentan con plazo hasta 2020. “Hay tiempo”, deslizó González Mantero.
«Si pasa el verano sin tomar medidas no habrá nada que hacer»
El presidente del comité de empresa de Compostilla, Juan Sobredo pidió a Del Olmo «urgencia» en la reunión que la consejera le aseguró que iba a mantener con el secretario de Estado de Energía «no nos queda plazo. Todo lo que se haga después del verano ya no servirá de nada», dijo. Sobredo agradeció el esfuerzo de Del Olmo y su preocupación por el sector «vemos que tienen conocimiento de lo que sucede», dijo Sobredo «y saben que hay que revertir la situación que ha puesto Enel sobre la mesa», que es el cierre de Compostilla en junio de 2020. Aunque Del Olmo ha anunciado que hay un documento sobre la mesa que pasará al Congreso, Sobredo desconfía «hasta que no lo veamos publicado en el BOE no nos creemos nada. Ya hemos tenido demasiadas palabras bonitas y no se ha hecho nada». Incluso, asegura que le recordó a la consejera que hace nueve años ya advirtieron de la situación que ahora sucede y hace dos le pidieron apoyo al propio presidente de la comunidad, Juan Vicente Herrera «tal vez si hubieran hecho algo no habríamos llegado a esta situación», dice. Sobredo asegura que, aunque es el Estado quien se tiene que mover para paliar una situación que podría dejar en suspenso 350 empleos directos en el Bierzo, la Junta debe moverse con rapidez para mediar en esta situación.
El presidente del comité asegura que la única salida es «invertir» para que la eléctrica no tenga justificaciones de adecuación a la normativa europea «no sé si lo debe hacer elEstado o quién, pero hay que hacerlo», pide «si queremos que se mantenga». Del Olmo aseguró que estará en contacto con el comité de empresa para ponerles al tanto de los próximos movimientos que definirán también los que ellos hagan. Por ahora esperan la reunión con los parlamentarios bercianos y Herrera pedida por la Mesa de la Energía.